Sector gastronómico: un informe visibiliza la discriminación contra las mujeres
Gracias a este informe, las malas prácticas y las falencias del sector gastronómico pueden visibilizarse, en busca de una solución y mejores oportunidades.
22 de febrero de 2023
Un informe da constancia de las problemáticas de género en el sector gastronómico. - Créditos: Getty
A pesar de que la pandemia supuso un duro golpe para la industria gastronómica –el cierre de locales, despido de personal–, sigue siendo uno de los sectores que más trabajo genera en nuestro país, además del de mayor índice de incorporación al mercado laboral para todas las edades y situaciones socioeconómicas. Su lado más ventajoso (para muchos se convierte en el primer empleo) choca inmediatamente con la informalidad que afecta a todos los géneros, pero dicha precariedad expone muchos más a las mujeres y a las disidencias (LGBTQI+), que no siempre cuentan con las herramientas (y el apoyo) al momento de enfrentar las dificultades, limitaciones y obstáculos que se presentan en el ambiente laboral.
La concientización –y el debate constante– alrededor de la igualdad social y económica, la discriminación de género, la brecha salarial, la invisibilización, las conductas inapropiadas y maltratos, mejoran el panorama con vistas al cambio, pero la gastronomía continúa al tope de la lista de los rubros más masculinizados donde, por ejemplo, se evidencia la poca presencia femenina en puestos de liderazgo.
Más allá de los esfuerzos que día a día realizan las organizaciones feministas, los colectivos inclusivos y las sociedades civiles para mejorar las políticas públicas, la desfavorable realidad de este sector persiste. Es ahí donde entran las acciones de Mapa de Barmaids & Afines, la primera plataforma de visibilización y empoderamiento femenino en el rubro gastronómico de Latinoamérica. En su afán por investigar y documentar las problemáticas de género de aquellas que trabajan en el área de la coctelería, cocina y emprendedoras, en 2019 pusieron en marcha la primera encuesta de género en gastronomía en LATAM, justamente, para poder relevar los datos de esas cuestiones que estaban siendo ignoradas dentro del sector.
Después de años de trabajo, podemos acceder a los detalles del informe El lado B de la gastronomía: sexismo y precarización en el sector gastronómico (Argentina, Chile y México), realizado por Marcela Muratori y Laura Marajofsky para el Observatorio de Género y Salud del Mapa de Barmaids & Afines; una punta de lanza para entender la situación y accionar por el cambio.
Datos que impulsan el debate y la posible solución de estos problemas. - Créditos: Feroz Visual Studio
¿Quiénes participaron?
A través de un formulario online –el cual se difundió desde las redes sociales y otros medios de comunicación electrónicos–, el informe alcanzó a un total de 656 mujeres y disidencias participantes: 386 en Argentina, 156 en Chile y 114 en México. Los resultados que se obtuvieron parten del cruce de datos sociodemográficos (edad, lugar de residencia, máximo nivel educativo alcanzado, tipo de trabajo y vinculación) y una serie de preguntas que indagan más profundamente en el estado laboral de las encuestadas, la brecha salarial, los micromachismos, la violencia simbólica y los casos de abuso.
Los resultados en Argentina
De las 386 personas que participaron de la encuesta en nuestro país –de entre 18 y 61 años de edad–, la mayor parte (39,1%) residen en CABA, el 31,8% en Buenos Aires y el resto en provincias como Córdoba, Santa Fe, Mendoza y Río Negro. El 40,7% tiene estudios terciarios, el 34,5% universitarios y el 24,9% secundarios, y cabe destacar que el 72,8% se encontraba en relación de dependencia al momento de llenar el cuestionario.
Sobre las entrevistas laborales: casi el 60% de las participantes señaló que alguna vez se sintió incómoda o que se la trató de manera indebida en una entrevista de trabajo. Entre las situaciones relatadas figuran el énfasis en la presencia física (“el ser linda”, “el tener buen peso”) por encima del nivel de estudios o preguntas sobre tener pareja o hijos, en el presente o a futuro.
Oportunidades según el género: un 66% afirmó que alguna vez sintió que no le dieron ciertas oportunidades por ser mujer. Ante el mismo puesto, muchas señalan que los hombres reciben un sueldo mayor, más reconocimiento de los superiores, más ascensos o la posibilidad de hacer horas extras. Los hombres también realizan menos tareas de limpieza o no reciben apercibimientos ante las ausencias o llagadas tardías.
Prácticas de micromachismo
El 87% señala, al menos, una práctica de micromachismo en su ambiente de trabajo; y de este porcentaje, el 75,15% admite percibir dos o más de estas prácticas:
- Un 69% menciona los comentarios indebidos respecto al físico o a la vestimenta.
- Un 52% abarcan los comentarios indebidos respecto de la capacidad o a las tareas que realizan.
- El 51% percibe dudas sobre sus habilidades profesionales en base a su género.
- El 49,7% sostiene que hay una genderización de las tareas y los trabajos, es decir, que estos se asignan en base al género.
- El 39,5% sufrió acciones indebidas o fuera del contexto laboral, como invitaciones o avances físicos.
- El 19,8% se vio excluida de las comunicaciones o reuniones de trabajo por ser mujer.
- El 11,1% padeció discriminación laboral ante situación de embarazo.
Abuso físico
De los datos más preocupantes, ya que un 33% de las participantes admitió haber sufrido abuso físico en el ambiente laboral.
- El 56% lo padeció de parte de un jefe u otros.
- El 32% de parte de compañeros de trabajo.
- El 11,9% causado por otras personas como clientes o dueños de locales.
Hay que tener en cuenta que muchas de las encuestadas no se animaron –o sienten vergüenza o temor– al momento de admitir este tipo de situaciones. De hecho, del total de las víctimas, solo un 3% afirma tener alguna denuncia o causa legal abierta. ¿Las razones para omitir el reporte?
- Un 15,7% decidió irse del lugar y no quería que afectara sus referencias profesionales.
- Un 14,9% no quería ser tildado/a de conflictivo/a en el ambiente laboral.
- Un 11,1% no supo qué hacer o a quién recurrir.
- Un 9,6% no estaba seguro/a de la responsabilidad o del caso puntual por el tipo de abuso.
- Un 7,7% tenía miedo de perder el trabajo.
Además, el 85% de los participantes conoce a otras mujeres o disidencias que estuvieron en situaciones de abuso físico o psicológico en su trabajo.
En el contexto latinoamericano
Comparando los datos con Chile y México, la encuesta llega a la conclusión que las puntuaciones medias de Argentina igual inclinan la balanza hacia una cultura más masculina. Nuestro país queda primero cuando se trata de preguntas incómodas durante las entrevistas de trabajo, pero los porcentajes respecto al abuso físico son relativamente bajos en relación con México. Eso sí, todos coinciden en la falta de perspectiva de género cuando miramos el ámbito gastronómico y la necesidad de visibilizar estos temas y, por qué no, crear más conciencia sobre el consumo considerando una nueva variable: una sustentabilidad humana con perspectiva de género en productos y servicios.
Al entrar a un café, un bar o un restaurante, te preguntaste, por ejemplo, ¿cuán variado es el staff del local?, ¿hay mujeres y disidencias? o ¿cómo tratan al personal y cómo es su cultura del trabajo? Encuestas como esta, y sus resultados, impulsan el debate y la solución de estos problemas, impactando positivamente en los negocios y las personas.