Mia Astral: "El amor es una energía muy amplia"

Con más de 700.000 seguidores en IG y más de 1.000.000 en FB, Mia Astral es capaz de convertir hasta al más agnóstico. Es de profesión abogada, aunque estuvo vinculada con la astrología desde siempre porque se crió con una abuela que hablaba de la posición de los planetas con la misma naturalidad con la que se habla del clima. Ya adulta, tuvo una ruptura amorosa que la dejó de cama. Fue a raíz de eso, buscando respuestas, que decidió abandonar la abogacía para dedicarse a la astrología.

Radicada en Miami, esta venezolana encontró la fórmula del éxito en la combinación de la astrología con el coaching y la Kabbalah, y todo mezclado con un lenguaje de oportunidad que nada tiene que ver con el tono determinista de la astrología tradicional. La entrevistamos a raíz del lanzamiento de El libro de las relaciones, que publicó Planeta en 2017 y que ya va por su cuarta edición.

La verdad es que yo no me propuse escribir concretamente este libro, fue más bien una demanda de mi corazón. Yo firmé un contrato con la editorial por una serie de títulos, y entonces empezamos a pensar temas. Mi idea era hacer dos libros de astrología y dos de coaching. Pero, para el momento en que empecé a escribir el libro, yo estaba pasando por una ruptura amorosa muy complicada y entonces pensé que lo mejor era escribir y hablar de lo que me estaba pasando.

La verdad es que con el libro salí de mis herramientas típicas. Creo que la sanación viene de la capacidad de apartar la estructura que te sostiene para tenerte, reconocerte. Cualquier proceso se puede manejar de una manera más linda si una eleva la conciencia. Porque te lleva a una relación con vos misma mucho más satisfactoria, aunque tengas que atravesar momentos incómodos para lograr lo que querés. Todo lo que de verdad vale la pena en la vida requiere atravesar esos momentos de incomodidad.

Lo que quise transmitir en el libro es: “Vamos, animémonos, aprendamos a sostener esos vacíos para que las cosas empiecen a acomodarse”. Cuando aprendemos a decir que no a lo que hay que decir que no, el sí empieza a manifestarse en todo. Hay una cantidad de máximas sobre el amor que yo no comparto. Por ejemplo, esa que dice que “si duele, es porque es para mí, porque algo me está enseñando”. Bueno, no, hay que ver qué tipo de dolor me está causando esa relación o si ese dolor me alinea con lo que yo quiero. O está esa otra que dice que “si abres el corazón, te lastimas”. Yo no creo que eso te pase si te juntas con gente que también trabajó un poco sobre sí misma. Es más, yo creo que cuando una llega a ese lugar donde se conoce, no tiene miedo, porque abre el corazón a personas que también están listas para abrirlo.

Debes estar feliz primero sola para que se pueda generar el encuentro con alguien más. En el tema de la pareja, es importantísimo elegir aquello que te gusta y, para eso, primero debes averiguarlo. Cuando estás sola es cuando de verdad tienes tiempo de pensar en lo que quieres. Y cuando tomamos conciencia de que el trabajo de completarnos a nosotras mismas es nuestra responsabilidad exclusiva, y de nadie más, entonces de verdad puede salir un vínculo muy bueno. Algo así como “yo me siento completa, vos te sentís completo: vamos a crear una nueva energía juntos”.

La astrología es la energía disponible. Es como decir: “Mira, está lloviendo, pero hay mucha gente que está caminando sin paraguas. Y eso que se sabía desde la madrugada que hoy iba a llover...”. Bueno, así es la energía de la astrología: vos podés usar o no esa información disponible. Aunque la astrología tampoco es absoluta, hay que tomar en cuenta la formación del individuo, su nivel de conciencia, su familia, la situación en la que vive... No es lo mismo una persona de Sagitario con ascendente en Acuario que nació en Suiza que un Sagitario con ascendente en Acuario que nació y vive en Venezuela, por ejemplo.

Al trabajo que realices con tu interior. Yo soy la primera en decir que no depende de la posición de Júpiter para que algo te salga bien. Sin nivel de conciencia, yo puedo cambiar todas las condiciones externas y seguir igual. Puedo tomar jugo verde todas las mañanas, hacer yoga o meditar y no tener ningún grado de espiritualidad en mi vida. En cambio, hay personas que no hacen nada de esto pero poseen el nivel más alto de espiritualidad: toman responsabilidad por ellas mismas y por sus actos. A eso me refiero con el nivel de conciencia. Invertir en esto es darte cuenta de que tienes las condiciones para llevarte a tu máximo potencial en todo momento.

Ya sea la astrología o cualquier otra herramienta, nada te va a quitar poder a menos que se lo entregues todo. Y esto vale para cualquier creencia que te convenza de que tu salvación está afuera de vos.

Es increíble, pero en 2017 trabajé conscientemente en el amor más que nunca en mi vida. A partir del más mínimo trabajo para conectarme con la necesidad del amor, el amor empezó a florecer en todos lados para mí: en cuestión de pareja, de amigos, de niños que van a nacer en mi grupo de amigos. Porque el amor es una energía muy amplia. Hablando de relaciones, yo diría que el amor es querer estar con alguien que también sea consciente de que nadie es perfecto pero que, si estamos juntos mirando en dirección del crecimiento, y con libertad, puede resultar genial.

Soy muy fanática de las sinastrías porque son un buen informe. Pero las más bellas que he visto son aquellas de dos personas que han soportado estar juntos: entre más alineados están para trabajar juntos, más se van a pulsar mutuamente los botones de lo que tienen que cambiar. Eso es lo que yo llamo un karma mate: esa persona con la que voy a trabajar para evolucionar. Muchas personas prefieren irse con el ego mate, esa pareja que no me molesta, que solo me adula.

Es una certeza absoluta. Cuando una termina una relación significativa, cree que no va a volver a sentir eso de nuevo. Pero la chispa está en ti. El 50% es tuyo. No me queda ninguna duda de que vas a volver a enamorarte, que vas a volver a sentir las mariposas y vas a poder crear algo de nuevo.

Este es el ABC de las relaciones para Mia Astral. Si querés aprender a amar mejor, primero leé este recuadro.

Nada te acerca más rápido a la materialización de tus deseos que sentirte segura de que te lo merecés. Y no porque alguien esté ahí para premiarte, sino porque pone en evidencia tu valor propio.

El camino del autoconocimiento es la única vía posible para lograr relaciones alineadas con lo que somos. En este sentido, Mia considera que un impedimento en una relación puede terminar resultando una verdadera suerte porque te fuerza a volverte sobre vos y a repensar tus deseos.

Este es un concepto difícil de entender para las personas que no trabajan sobre sí mismas. Se trata de que una atrae exactamente lo que es en un momento dado, un patrón similar al propio. Aquellas personas que no hacen el ejercicio de verse a sí mismas van a encontrarse más de una vez haciéndose las mismas preguntas: “pero ¿cómo puede ser que me haya enamorado de un celoso si yo no soy celosa?” o “¿por qué me atrae un fóbico si yo no soy para nada fóbica?”.

Cuando no somos conscientes de que atraemos lo que somos, podemos quedarnos pegadas años con las mismas elecciones. Para poder iluminar patrones, debemos invertir tiempo, paciencia y energía. Tomar nota de nuestras relaciones, de nuestras elecciones, pedirles a nuestras amigas que nos señalen lo que no vemos, sostener la sombra y tratarnos con mucho amor en el proceso, porque descubrirse no es fácil.

Mia Astral salió a la cancha del mundo editorial argentino con dos títulos ultravendedores: Predicciones 2018 y El libro de las relaciones, que surgió más como un diario de experiencias amorosas. “Es un libro de amor, rupturas, cachar patrones, reenamorarte de ti mismo, con los cuentos de unas amigas, lo que nos pasa a todos, cómo nos superamos, cómo nos reímos, cómo sanamos desde un lugar común”, dice Mia.

“Tengo una amiga de Piscis con ascendente Géminis que siempre pareció estar en la relación perfecta. Y aunque esto ya no lo era después de siete años, ella relacionaba la separación y el qué dirán con el dolor, uno mucho más grande del que silenciosamente estaba sintiendo dentro. Con estas meditaciones, ella se dio cuenta de que verse en un año en el mismo lugar era insostenible. En menos de tres meses, se sinceró e hizo el plan. Luego, descubrió que él desde hacía un tiempo se veía con otra persona, tal como ella sospechaba”.

“Esta es la historia de Ona, una mujer de 33 años que está recientemente divorciada después de una relación de 13 años... Sí, se casó muy joven, pero ese no es el centro del asunto. El hecho es que, después de un divorcio muy difícil, saltó a una relación en poco tiempo y nunca se dio la chance de procesar la separación, hacer trabajo interno y actualizarse. No tardó mucho en tener los mismos problemas con el nuevo chico. Se trataba de que su perspectiva era la misma”.

“También tengo un amigo, llamémoslo Javier, al que las cosas le han costado mucho a lo largo de su vida. La creencia interior que carga es: ‘si cuesta, vale la pena’, y en esas se la pasa detrás de chicos que son difíciles de atrapar, y entre más cuesta arriba, más piensa que son The One. En verdad, pueden serlo o no. Pero Javier está más en una relación con sus patrones no iluminados que viendo lo que el otro tiene para ofrecer y, si no hace algo al respecto, puede pasar muchos años de su vida persiguiendo un imposible”.