USHUAIA.- El clima en Tierra del Fuego es variable y con la expectativa de tener las cuatro estaciones en un día. Por eso, caminar por los confines australes tiene su cuota de imprevisto, que le agrega más sabor a la aventura de desentrañar paisajes por estas latitudes.
Dicen por acá que si llueve no hay que preocuparse mucho porque es posible que al rato esté saliendo el sol. También es cierto que en pleno verano no es raro que caiga alguna nevada y que el abrigo es indispensable en toda época.
Para emprender la marcha hacia una de las metas, el mirador de los lagos Fagnano y Escondido, es indispensable que el equipo incluya como elemento vital el traje impermeable que va dentro de la mochila individual junto con la vianda.
El paso Garibaldi, un hermoso lugar donde se abre la cordillera, ubicado a unos 55 kilómetros de Ushuaia, constituye el punto de partida del grupo, previo traslado en combi desde la capital de la provincia austral. Como se asciende desde los 400 hasta los 900 metros, que es una altura significativa en la isla, se requiere un óptimo estado físico, buena salud y estar acostumbrado a caminar.
Turba, castores y lengas
La primera parte transcurre hundiendo los pies por el sendero de turba, mientras Marcelo de Cruz, coordinador y guía del trekking, explica las etapas de esta formación, característica de los pantanos fríos.
Más adelante aparece la obra de los cuestionados, pero también increíblemente laboriosos castores. A expensas del bosque construyen grandes diques en los arroyos y unas estructuras piramidales que conforman las viviendas.
No es fácil avistarlos por los hábitos crepusculares que presentan y porque son animales desconfiados. El ascenso continúa por el sendero de lengas hasta llegar al límite altitudinal de esta especie arbórea que a los 600 metros adquiere forma achaparrada.
A mayor altura aparecen los pastizales y arbustos como el usillo fueguino, coloridas siemprevivas y la singular flor del chocolate.
Un respiro
A los 700 metros de altura se llega hasta un mirador para descansar un rato, tomar un té, un café o un chocolate caliente con galletitas y charlar con los integrantes del grupo, que suele reunir a gente de diferentes partes del mundo. El último tramo se hace por el sendero del Hachero para alcanzar los 900 metros de altitud, donde se encuentra el mirados de los lagos Fagnano y Escondido.
Desde aquí se ve la cordillera nevada, el tempestuoso lago Fagnano y el verde de las aguas del Escondido. En este balcón natural, mientras se almuerza, es emocionante apreciar el sobrevuelo de los cóndores o distinguir por las laderas la esbelta silueta de los guanacos.
Una hora después se emprende lentamente el regreso hacia el Valle de los Castores, eso sí, acompañado de un bello paisaje, para arribar al punto de partida.
Datos
El costo del trekking es de 80 pesos y la duración de ocho horas, cinco de las cuales corresponden a caminata neta.
Incluye equipo impermeable, mochila individual, vianda, coordinador, guía, traslado desde Ushuaia. Conviene llevar calzado resistente e impermeable y anteojos de sol.
Para mayor información se puede llamar en Ushuaia por el 0901-22637, y en Buenos Aires, por el 311-3830
Alicia Terradas