Las hermanas más divertidas de la radio planean trabajar juntas este año. Julieta: enteriza (My Fair). Sol: enteriza (Luz de Mar, $2199). - Créditos: Sol Levinas. Producción de Bár Midley. Realización de Diego Andrés Martínez
Son hermanas, amigas, cómplices. Y en breve, también compañeras de trabajo. Con ellas hablamos del poder que les dio crecer juntas, elegir la misma pasión y de los cambios que atraviesa el género en la radio.
No saben exactamente en qué, pero tienen la certeza de que este año las encontrará, por primera vez, trabajando juntas. Y están en ese proceso creativo, de juntarse, de intentar darle forma a un proyecto propio, que las divierta y que tenga que ver con la esencia de ambas. Julieta es la mayor de las Rosales -y la coequiper de Sebas Wainraich en Metro y Medio desde el 2007, mientras que Sol es dos años menor y trabaja junto a Nicolás Artusi en la conducción de Su atención por favor. Escucharlas hablar es constatar ese invisible y poderoso lazo de sangre que las une y que podría pensarse como espiar una tarde de domingo en el patio familiar tomando unos mates, o un día cualquiera en el balcón de alguna de ellas, birra en mano. Son verborrágicas, ocurrentes, divertidas y, claro, respiran pasión de radio.
Julieta Pink - Créditos: Sol Levinas. Producción de Bár Midley.
¿Cómo es ese proceso de crear algo juntas?
J: Nos mandamos muchas cosas que escribimos para que la otra pueda leer fuera de contexto, sin que la otra esté presente... o también sale el "vení, vení, se me acaba de ocurrir algo". A ver, probemos, grabamos con el celular giladas, algunas las subimos, otras no.
S: A veces nos divertimos paveando un domingo, hacemos un video juntas, lo subimos a Instagram. Tenemos la vara muy alta también. Sabemos que puede suceder la magia y que si prendemos un micrófono, con los años que venimos trabajando, va a salir algo. Pero queremos algo que esté bueno y que nos convenza y que nos guste.
¿Y que las mantenga en la zona de confort de la radio o correrse?
S: Corrernos un poquito. Nos divierte también la parte visual, de tele.
J: Metro ahora tiene muchos contenidos en la web que va explotar el año que viene. Estamos viendo distintos formatos.
Sol Pink. - Créditos: Sol Levinas. Producción de Bár Midley.
S: Nosotras teníamos grabaciones con voces nuestras, hacíamos la apertura, la tanda, el jingle lo cantábamos, hacíamos el informativo. Un juego que deben hacer un montón de niños y que nosotras como siempre tuvimos la convicción de querer hacer eso. Fue pasando el tiempo y ella fue la primera en estudiar y así se fue dando.
Nuestro título de tapa habla de la hermandad y la fuerza femenina. Criarse junto a una hermana es diferente a tener hermanos varones.
J: Nosotras tenemos un hermano mayor y es muy distinta la relación. Nos amamos los tres.
S: Con una hermana es como vivir con tu mejor amiga.
J: Nos pasa algo, no sé si eso querés que lo contemos...
¡Cuéntenlo!
J: A mí me duele la panza y a vos te está pasando algo. Es como un hueco acá. En mis embarazos a esta le faltó vomitar, pero tenía unos mareos.
S: Sensaciones de decir "hoy me sentí mal todo el día", –"¡Yo también!"; "porque estoy angustiada con esto", -"¡Yo también!"
J: Cuando una está angustiada, sin saberlo, la otra está angustiada. Pero nos carajeamos también, que está buenísimo. No es todo color de rosa...
Sí, pero está esa cosa incondicional que te podés...
S: Decir lo peor...
J: Yo siento que le puedo decir absolutamente todo como me sale. Podemos explotar, decirnos de todo, bajar dos cambios y estamos al día con los sentimientos. Me parece lo más honesto que hay.
¡Tranqui, chicas, hay para las dos! - Créditos: Sol Levinas. Producción de Bár Midley.
S: Creo que nos turnamos. También nos enseñamos la una a la otra. Hay momentos en los que ella se enoja por alguna cosa...
J: No me hables, después te explico lo que me pasó y después charlamos un rato más tarde.
No hay otro sentimiento más desolador que pelear con hermanos.
J: No hay paz.
S: Yo pienso ahora que soy muy Libra y yo lo quiero arreglar ahora.
J: Yo necesito que se me pase.
S: Yo necesito que ahora esté todo bien.
Igual se nota que se re divierten juntas…
J: Sí, es con la persona que más me divierto también, aparte del equipo de la radio... Trabajar y reírse me parece que es lo mejor que te puede pasar en la vida; vivir y reírse ni hablar. De hecho estábamos recordando recién que cuando hice la tapa anterior de OHLALÁ! ella vino conmigo porque a mí no me gusta sacarme fotos. Ella me acompañó para que yo la mire a ella y me pueda reír natural, que me pueda sentir relajada, porque en las sesiones de fotos tengo cuatro caras, soy muy de radio, no sé posar.
También las hermanas son como la custodia de tu historia. Y reconstruyen las historias familiares, porque cada una tiene una vivencia diferente con los padres. ¿No les pasa eso?
J: Sí. Nosotras toda la infancia compartimos habitación, compartimos amigos, a mí me dejaron ir a bailar por pedido casi del Papa, escribí una carta "mido 1,80, déjenme ir a bailar a la noche, no puedo ir más a la matinée". Y con ella, todo lo que a mí me costó, yo la pedía. "Che, déjenla ir a bailar", -"no, porque a vos te hicimos esperar", "no importa, yo la cuido. Si es para quedar bien conmigo no importa, déjenme que la lleve yo". Empezó a ir a bailar a los 13 conmigo.
S: A mí me pasaba eso. Ella tenía una relación con mis viejos de pedir y de ganarse sus permisos y yo era la chiquita que iba ganando.
J: Yo era muy sumisa, me decían "vas hoy a bailar pero por dos sábados no". ¡Y por dos sábados no preguntaba! Re canadiense, re respetuosa. Es mucho mejor ser chiquito.
Julieta es la mayor y la que siempre se portó bien. - Créditos: Sol Levinas. Producción de Bár Midley.
Aparte los padres también cambian con los hijos...
J: A veces escuchaba esos padres o madres que dicen "yo tuve tres hijos, a los tres los crié iguales, los llevé a la escuela, con todos hice la tarea, ¿cómo puede ser que uno me salió así?". No, no los podés criar igual, no hay manera de que los críes igual. Yo soy lo opuesto de lo que era con Baltazar con Jazmín, me doy cuenta todo el tiempo, digo "¡Ay, cómo no sabía esto!" o me doy ternura cuando me acuerdo de las huevadas que hacía: esterilizar todo y todas esas cosas.
Y además, Sol, tener sobrinos es lo máximo del mundo.
S: Es lo máximo del mundo. También pensaba en cómo se reconfigura toda la familia, porque cuando nacieron mis sobrinos yo conocí a mi hermano tío, a mis papás abuelos...
J: También que al nacer una persona nueva en la familia es como que todos cambian. Es como visualmente que todos cambian de lugar, no solo el mote de "tío". Todos nos corremos.
Cambian los rituales, cambia todo.
S: Las reuniones familiares, ya el eje es otro y es espectacular.
J: Está bueno lo que se reconfigura también. Vos tenés, al haber sido hija, cómo se hacían las cosas; empezás a crecer, empezás a decir "no tenían razón mis papás en todo", empezás a descubrir esa parte tuya y la relación con los demás. Con la maternidad llega el momento de hacer lo que vos quieras. Lo que recibiste, lo que se te ocurre y hacer lo que podés.
¿Les pasó que vos te casaste, tuviste hijos y quedaron como en etapas diferentes que les costó acompañarse o no?
S: Estamos en etapas diferentes hace un montón de años, pero igualmente a veces puede pasar que los consejos que ella me da de "escribile de vuelta" y es "no, Julieta, no funciona así".
S: Yo también debo tener los mismos consejos... Como no soy mamá le digo "vos dejalo que haga...". Entonces nos bancamos en esa y nos da como otro panorama fuera del círculo porque también cuando uno está con los mismos temas y con amigas en las mismas situaciones por ahí un consejo de afuera viene bien...
J: También hay algo de los padres que nos sentimos poco interesantes para los no-padres, entonces nos agrupamos para decir "no les rompamos los huevos a estos con todos estos temas monotema". Cada uno se va juntando con los que están en la misma porque es una cuestión hasta de supervivencia de la especie. Pero tratamos de meter un "che, jueves, birra", dejamos a los pibes, ella sale de la radio y nos vemos solas.
¿Tienen el mismo anillo?
S: Siempre tuvimos el mismo.
J: Antes teníamos un perrito agarrado que lo cambiamos por este. Y antes teníamos uno de coco.
S: Lo que hacemos es que nos gusta alguno y por ahí una le compra a la otra, con la posibilidad de soltar si alguno se pierde...
J: Eso lo dijiste vos, para mí no estaba en el reglamento.
¿Qué admiran la una de la otra?
S: Yo creo que ella tiene algo... en la parte profesional, como una especie de repentismo y de ocurrencias y de cosas que yo, que me crié con ella, que tengo la misma formación, el mismo humor y digo "¡No puede ser!". Personalmente, es muy buena. Esa incondicionalidad, ese estar para todo, y no solamente para mí que soy la hermana, sino que es muy atenta y preocupada por el entorno y por todo.
J: Profesionalmente, ella siempre hace varios roles: es muy buena compañera, es muy buena sola, se la recontra banca desde el minuto uno, no con la experiencia que te da esa solidez, siempre fue muy al frente. Ella tiene la ambigüedad al día, porque hace un programa de entretenimientos, de viaje, súper divertido y a la mañana, la noticia pura y dura...
¡Se consultan todo! Son compinches inseparables y detestan estar peleadas. - Créditos: Sol Levinas. Producción de Bár Midley.
Foto: Sol: Camisa lino roja (Etiqueta Negra, $5200) ; corpiño a rayas (Caro Cuore $1390); bombacha alta a rayas (Caro Cuore $990); sandalias rojas (Hush Puppies para Grimoldi $1690). Julieta: enteriza estampada (Caro Cuore, $2590) ; short (Wanama, $2290); sandalias de playa (Hush Puppies para Grimoldi $1350).
Ahora hay toda una búsqueda de incluir más lo femenino en el medio radial. ¿Sienten que está habiendo como una renovación ahí?
J: Sí, y también una preocupación por buscar ese cambio. El director artístico de Metro, que es Andrés Pandiella, tiene una sensibilidad, una cercanía no solo con los conductores, sino con esa necesidad de ampliar y de buscar la igualdad. No en Metro solamente, en toda la radio, que siempre fue muy machista y que ni nos dábamos cuenta las mujeres que estábamos adentro. Yo me acuerdo las primeras notas que me hacían, cuando tenía 20, me decían "en un medio tan masculino, ¿cómo te sentís tratada?". Y yo decía "qué rara esta pregunta que me están haciendo". También en la ignorancia de la juventud, porque como no me tocó, no sabía que ese machismo existía. Me tocó estar en un grupo donde siempre trabajé con Sebastián, con grupos que armábamos juntos, siempre co-conduciendo, era como "yo me siento súper bien tratada, yo siento que cobro bien, ¿de qué me estarán hablando?". Cuando uno empieza a crecer decís "ah, todo esto era para agradecer en ese momento", porque no era lo habitual. Después empezás a estudiar, empezás a ver a las mujeres que abrieron camino, lo que les costaba y que las ponían a decir la hora y la temperatura nada más.
Entré en una buena etapa y aparte tuve suerte, porque ahora está el destape groso, pero cuando yo arranqué no había muchas mujeres. Estaban en otro rol las mujeres. O cuando el conductor decía "hablá ahora".
¿Qué sienten que están saliendo a buscar o sumar?
J: Yo creo que un poco esa paridad que tanto se está pidiendo. No solo lo que se escucha al aire, sino que nos tienen en cuenta, nos llaman a las reuniones que antes no te llamaban, o que las tenían los cuatro conductores.
Hay una necesidad de escucha que empezó paulatinamente, pero a medida que todos vamos despertando... Nosotras siempre tuvimos el lugar para ir a hablar y decir qué nos parecía, por fuera de nuestros programas. A mí me encanta Metro, me parece que es una radio con mucha sensibilidad.
Hay mucho formato nuevo también...
S: Claro, algo que era de mármol se rompió, se abrió y hay espacio...
J: Hoy escuchás a cinco chabones hablar y te hace ruido. ¡Antes no!
S: Los medios también, los que trabajamos y los que están a cargo de medios de comunicación, además de una responsabilidad tienen una oportunidad de cambiar cosas y de cambiar paradigmas que se veían súper acartonados y que eran de una manera. Nosotras arrancamos a laburar en una época que venían las locutoras y los locutores súper embolados, de otra onda y quizás si eso hubiera seguido yo no hubiese tenido trabajo...
Y hoy también, por ejemplo, están los podcasts, está como abriéndose un poco el juego para que se explote y que no estés esperando el llamado de un medio...
S: Yo creo que hoy sos tu propio medio de comunicación. Con las redes sociales, con los Podcast, con lo que sea. Inclusive las redes, yo puedo hacer un programa con ella en Instagram TV. Y ya está. Y creo que los medios convencionales se dan cuenta de esas cosas y se abren un poco más y se tienen que aggionar. Yo creo que los medios convencionales van a seguir existiendo, siempre va haber alguien que prenda el equipo y sintonice la radio. Creo que esas cosas y esa magia no se va a perder, pero al abrir tanto el abanico...
J: Se va a compartir el espacio.
¿Hacia dónde sienten que van los medios más convencionales, la radio por ejemplo?
S: Yo creo que es esto, es abrir el espectro, el panorama y desacartonarse de lo que uno ya está tan acostumbrado. Creo que hay algo hoy por hoy con la inmediatez y la paciencia que uno tiene como consumidor de algo. Si antes veías una película de media hora, después un videíto de diez minutos y ahora un video en YouTube de ocho minutos te parece largo y querés ver algo de un minuto... todo ese tipo de cosas es evolucionar. Antes hacías una nota de 70 minutos, hoy en día la cortás, ponés temas en el medio. Tenés que estar muy atento a eso.
J: Para mí hay que actuar con eso, con los tiempos, con la ansiedad y con saciar al oyente, mostrarle muchas cosas. Captar nuevos públicos también. Para mí la clave es ir adaptándose sin perder la esencia. Es lo más genuino que hay. Ahí vamos viendo también con nuestro proyecto, si termina por un lado o mutará para otro, pero creo en no traicionarnos.•