Cómo pintar los muebles de la cocina para remodelarla sin gastar de más

Una buena mano de pintura (y un poco de paciencia) puede transformar completamente las alacenas y bajomesadas de tu cocina, convirtiéndose además en una solución económica, creativa y con resultado inmediato.

Pero antes de empezar, seguramente te estarás preguntando qué muebles se pueden pintar. Como te dijimos antes, podés renovar tanto muebles de madera maciza como los de melamina, MDF o aglomerado, porque el secreto está en el paso a paso.

Lo que vas a necesitar es:

• Pintura (puede ser esmalte sintético, esmalte al agua o chalk paint)

• Imprimación (clave si vas a pintar melamina)

• Lijas (de grano medio y fino)

• Rodillo de espuma y pinceles

• Cinta de pintor

• Desengrasante (el de cocina que usás siempre está bien)

• Destornillador, trapos, balde y guantes

1. Desmontá, limpiá y protegé: Sacá puertas, cajones y herrajes. Limpiá bien con desengrasante para que la pintura adhiera. Cubrí con cinta las zonas que no querés pintar.

2. Lijá: Lijá con grano medio para abrir la superficie y después con uno fino para suavizar. Fundamental para que la pintura se fije bien, especialmente en melamina.

3. Aplicá la imprimación: Solo si no son muebles de madera. La imprimación ayuda a que la pintura dure más. Aplicá y dejá secar según indicaciones.

4. A pintar: Elegí el color que te guste. Pintá en capas finas, esperando que seque antes de la siguiente. Usá rodillo para un acabado más prolijo.

5. Sellá y protegé: Cuando esté seco, aplicá barniz o cera para proteger, ideal si la cocina se usa mucho o hay humedad.

6. Volvé a montar: Poné puertas y herrajes. Si querés, renová tiradores para un plus.

Pintar los muebles de la cocina no solo es práctico, sino que también puede ser súper creativo y divertido. Una idea fácil es optar por colores neutros como blanco, gris o beige, que iluminan y agrandan visualmente el espacio. Si querés algo más original, podés elegir un color vibrante para una pared de muebles o solo para las puertas de arriba, y así crear un contraste moderno y fresco. Otra opción práctica es usar pintura pizarrón en alguna puerta para anotar la lista de compras o mensajes divertidos.

Además, podés jugar con detalles como hacer franjas verticales u horizontales en colores combinados, o aplicar plantillas para crear dibujos sencillos como flores, geometrías o rayas. Estos toques dan personalidad y estilo sin complicarte ni gastar de más.