Para qué sirve la planta siempre viva y cómo se llama en la Argentina

Nos referimos a la Sempervivum calcareum, una planta suculenta originaria de las montañas de los Alpes y otras regiones rocosas de Europa. Su nombre científico es bastante claro en su significado, ya que proviene del latín: semper (siempre) y vivum (viva), haciendo referencia a su capacidad de mantenerse verde y vital durante todo el año, incluso en climas adversos.

Tiene una forma muy característica, desarrollando rosetas compactas de hojas carnosas, generalmente verdes con puntas rojizas, que recuerdan a pequeñas flores geométricas. Estas rosetas, además de decorativas, son sumamente resistentes.

En Argentina, la siempreviva, Sempervivum calcareum, es conocida popularmente como “uña de señorita”, debido a la forma puntiaguda de sus hojas, que recuerdan a uñas delicadas y prolijas.

Sin embargo, el nombre genérico de “siempreviva” es el más usado: esto puede generar cierta confusión, ya que existen otras especies que reciben el mismo apodo. Pero cuando hablamos de la uña de señorita, nos referimos específicamente a esta variedad del género Sempervivum.

Su principal atractivo es ornamental, gracias a su aspecto simétrico. Por su facilidad de cultivo y origen, es ideal para utilizarla entre rocas y jardines de piedras, pues tolera suelos pobres y se adhiere fácilmente a grietas. También se banca perfectamente estar en macetas y contenedores decorativos, sola o en combinación con otras suculentas para conseguir composiciones muy vistosas.

¿Y se la usa más allá de la jardinería? A lo largo de la historia, se la ha asociado a varios usos medicinales. Por ejemplo, en la medicina popular europea, las hojas carnosas de Sempervivum se usaban como cataplasma para aliviar quemaduras leves, irritaciones de la piel y picaduras de insectos.

Si nos vamos al terreno de lo simbólico, la tradición popular la considera una planta protectora contra rayos y tormentas, motivo por el cual se la cultivaba en los techos de las casas alpinas.

Una de las grandes ventajas de esta planta es que cualquiera puede cultivarla, incluso quienes no tienen experiencia previa con suculentas. Obviamente, hay que tener en cuenta algunos cuidados y consejos básicos, como que tenga buena exposición al sol, ya que mientras más sol reciba, más intensos serán los tonos rojizos de sus hojas.

En cuanto al riego, debe ser escaso, ya que almacena agua en sus hojas. Basta con regar cuando el sustrato esté completamente seco, siempre evitando el encharcamiento, que puede provocar pudrición. Cuando aparecen hijuelos alrededor de la roseta madre, se recomienda separarlos y plantarlos en otra maceta.