Luna llena en Piscis: esta es la razón de por qué hablamos de orden versus el caos

Además de lo ya dicho sobre la importancia de esta Luna Llena en particular, por ser la última en el zodíaco, podemos mencionar los temas que pone sobre la mesa.Se trata de dos energías mutables, es decir, que hablan de cambios. Pero cada una lo hace a su manera.

La energía virginiana es de tierra. Es el enlace entre los otros dos signos de tierra, que son Tauro y Capricornio: el inicio de los proyectos y su máxima concreción. Virgo es el signo encargado de cuidar los procesos y darles continuidad. Por eso se asocia al trabajo, el orden, la organización, la mesura, el esmero y, también, una actitud servicial y de ayuda a los demás desde un lugar concreto. Además, como se siente responsable de que todo salga bien, puede ser perfeccionista y obsesionarse con el control.

Piscis, en cambio, es el último de los signos, no solo en el elemento agua, sino en la rueda zodiacal. Representa la conclusión, la integración de todo lo aprendido, la disolución de un ciclo. Como disuelve barreras, facilita la empatía hacia los demás, la intuición, la inspiración artística, la espiritualidad y todo lo que sea emocional.Es una Luna llena que nos pone frente al tema de cómo encaramos los cambios y cómo aceptamos los finales de ciclo. Es necesario que asumamos que no tenemos control sobre los tiempos naturales de algunas situaciones o relaciones, y que cuando llega el momento hay que dejarlas partir.

En todas las personas, la energía de la Luna Llena se hace sentir intensamente. Es común que haya dificultad para dormir, o también más necesidad de descanso que habitualmente; la actividad onírica es intensa y trae sueños extrevagantes y puede generar una electricidad física que se traduce en sobrecarga de energía. La Luna agita las mareas y somos agua en un gran porcentaje. Va a haber revelaciones importantes y tironcitos que vienen de lo más profundo y revelan lo oculto o lo no reconocido.

Además, recordemos que más allá de la preponderancia de nuestra energía de Sol, Luna y Ascendente, los doce signos viven en mayor o menor proporción en cada una de nosotras, por lo que todos los eventos planetarios nos repercuten en alguna medida. 

Si tenés a mano tu carta natal, podés sacarle más provecho a esta información buscando en qué casa se localizan Piscis y Virgo, y si tenés planetas o comienzos de casas entre los grados 03° y 11° de estos signos (cuanto más cerca del grado 07°, mejor). 

¿En qué área de tu vida vas a sentir el efecto de esta Luna Llena? ¿En lo vincular, lo laboral, lo personal…? Eso solamente lo puede responder tu carta: fijate dentro de qué casa están estos grados.  Desde acá, sin embargo, podemos adelantar de qué manera vas a sentir esta influencia.

Puntualmente, esta Luna es particularmente importante para Piscis y Virgo, que son los protagonistas del evento y que pueden sentir una invitación a la polarización en la energía opuesta, notando que no se sienten “como ellos mismos”. Es una excelente oportunidad para integrar esa energía que no les resulta familiar, acercarse a ella y experimentar cómo se sienten.

También es muy importante la influencia sobre los signos regidos por Saturno: Capricornio y Acuario, y en menor medida para Sagitario, regido por Júpiter, que no se encuentra tan involucrado como Saturno en este proceso pero influye. La sensación de cierre de ciclos va a ser importante en algún sentido en sus vidas.

Otros signos de especial relevancia son Tauro, Cáncer y Escorpio, porque esta Luna hace contactos armónicos con su energía. Para ellos se cumple una etapa de seis meses y pronto se abrirá una nueva, que los va a estimular a buscar nuevas maneras de trabajar en su chispa única y volcarla a grupos y causas.

Géminis va a sentirse desafiado a hacer los cambios necesarios para poder crecer. El desafío será dejar de pensar en exceso y entregarse al fluir de las aguas oceánicas que representa Piscis.

Los signos menos afectados por este plenilunio son Aries, Leo y Libra. El desafío va a pasar por hacer un trabajo de introspección que ilumine y defina su manera de lidiar con las situaciones que se terminan y de ceder el control, aceptando que muchas veces hay cosas que escapan de nosotros y necesitan que confiemos en el proceso que se está realizando más allá de nuestra conciencia.