Dani Tallarico: fue mano derecha de Betular y ahora tiene su propia pastelería

Después de diferentes experiencias, entraste a trabajar en el Palacio Duhau. ¿Cómo fue llegar a un lugar de tanto renombre?

Cuando entré, sentí que estaba en Disney porque el hotel es hermoso, te dan todas las herramientas de trabajo que te puedas imaginar, te dan un uniforme. Ahí estuve casi 11 años trabajando. Al año que empiezo yo, viene Damián Betular como chef pastelero. Yo era ayudante de pastelera y con los años fui creciendo hasta ser sous chef de pastelería.

Con Damián también se hicieron muy amigos. ¿Qué aprendiste de todos los años de trabajo con él?

Aprendí muchísimo. No solamente en la pastelería, sino en cómo comunicarte con la gente. Él es súper carismático, adonde va, la gente le presta atención, desde siempre, incluso antes de ser el Betular que es hoy. Y siento que aprendí mucho de él, tanto dentro como fuera de la gastronomía.

¿Y cómo fue que decidiste irte y empezar tu proyecto?

Fue en la pandemia. Si no fuese por la pandemia yo no hubiera dejado el hotel nunca. La pasaba muy bien, me gustaba mucho estar ahí, hice muchos amigos y había muy buena onda. Pero con la pandemia cerró el hotel y después de un mes de no hacer nada me puse a hacer pastelería en mi casa y a venderles a clientes y cafeterías. Me empezó a ir muy bien, así que decidí renunciar al hotel. Y ahí conocí a uno de mis socios, que me propuso poner un local. Yo estaba en duda, hasta que me mostró el local, lo vi y me encantó, tenía un horno de barro buenísimo y unos ventanales hermosos por los que entraba una luz increíble. Así que ahí arrancó todo el proceso para abrir Tallarica. 

Tenés muchos platos salados, cookies y tortas, ¿cuál es el boom del menú? 

Las cookies. Hubo una que se hizo re viral en TikTok, que es la Cookie Red Pop. Una cookie red velvet con un frosting de queso y pochoclos caramelizaos con un grano de sal, que a la gente le voló la cabeza. No pensé que iba a ser ese furor. 

 

También hiciste algunos pop ups dentro de Tallarica, uno de ellos con Betular. ¿Pensás seguir haciéndolos?

La idea es que sí, pero estoy esperando que venga el clima lindo y ahí empezar de nuevo. No todos los meses, porque pienso que, si no, se le va la magia. Algo cada tanto y bien pensado con los invitados. Que sea una experiencia linda y que todos, aparte de trabajar, nos divirtamos. 

¿Tenés planes a futuro?

Hace poco abrimos otro Tallarica en Imagina Bocha. Apuntado a un público más de niños, porque el paseo está pensado para ellos, con juegos y talleres. Es un Tallarica con sándwiches y la misma pastelería. Pero no planifico mucho más. La vida misma me lleva y la transito  sin pensar lo que viene. Siento que las propuestas van llegando solas. .