5 cosas que no te podés perder de Kona, Hawaii

Con un aura muy particular que logra equilibrar enormes mansiones con comunidades surfistas y hippies, Kona es un paraíso que te ofrece muchísimas opciones.

Al planear una visita a cualquiera de las islas de Hawaii, es fundamental tener en cuenta que estas vacaciones requieren sí o sí alquilar un auto. No solo es una cuestión de necesidad por las distancias y la falta de transporte público, sino también de placer. Kona tiene escenarios bellísimos y miradores en los puntos más importantes de sus caminos. Además, manejando se pueden conocer las diferentes caras de la isla, desde los puntos más comerciales hasta las zonas más rurales y las pequeñas granjas familiares que se distribuyen a lo largo de la isla.

Uno de los puntos obligados para visitar en Kona es el “Parque Nacional de los Volcanes de Hawaii” donde se encuentra Kilauea, uno de los volcanes con mayor actividad del archipiélago.

Para recorrer el parque se combinan caminos que se realizan con el auto y a pie. Los senderos no tienen mayor dificultad y van cruzando diferentes vegetaciones, además de combinar el paseo por tuberías de lava; cuevas generadas por el paso de lava caliente.

Tip: no hay que ir demasiado tarde. Es un programa para dedicarle el día y, si oscurece temprano, se van a perder la mejor parte del parque o ver el volcán de noche.

Otro de los volcanes imperdibles es Mauna Kea. En este caso es un volcán inactivo y el más alto de todas las islas. Y, al contrario de Kilauea, uno de sus mayores atractivos es en el atardecer. Con uno de los atardeceres más hermosos del mundo, al hacerse de noche te permite ver un cielo completamente despejado para admirar.

Kona se caracteriza por las playas de agua cristalina y roca volcánica. Entre las favoritas que no se pueden perder están:

Manini'owali Beach: una playa donde no va demasiada gente y que está rodeada de un parque de roca volcánica. Con arena clara y agua transparente, no va a ser raro ver alguna ballena, cangrejo o tortugas mientras disfrutás del agua.

Eso sí, no es una playa recomendada para ir con niños. La marea es bastante fuerte y puede resultar peligroso.

Arena de colores: Kona te ofrece dos visitas únicas en relación a sus playas: una es la Punalu'u Black Sand Beach Park, que se caracteriza por tener su arena negra. Y South Point, donde la arena es verde. Para ambas hay que caminar bastante desde el estacionamiento pero hacerlo tiene su recompensa.

Waipio Valley es uno de esos lugares únicos en Kona. Conocido por haber sido la residencia permanente de muchos reyes hawaianos y célebre por el árbol nioni, aquí se encontraba el viejo palacio de hierbas.

Para recorrerlo es necesario bajar una pendiente de 610 metros (que se puede hacer en auto o caminando) con una vista imperdible. Al descender se van a encontrar con una playa de arena negra y pequeñas cascadas. Además hay varios senderos que solo se pueden recorrer a pie y que conducen a la parte alta del valle.

La comida dentro de Kona como de toda la isla es realmente variada y se puede disfrutar de muchos lugares que se especializan en comidas con frutos de mar. Sin embargo, hay dos lugares que no te podes perder:

Kona Brewing Co. Es la casa de la cerveza artesanal dentro de la isla. Con una gran variedad de cervezas, ofrecen platos sencillos pero riquísimos y a un valor accesible. (20USD por persona)

Annie’s burgers. Famoso por tener las mejores hamburguesas de todo Kona, Annie’s burgers ofrece muchísimas opciones que incluyen algunas variedades vegetarianas y tampoco es costoso (25USD por persona).

Eso sí: hay que tener paciencia porque es imposible ir a comer a cualquier lugar sin tener que esperar 20-30 minutos. Así que antes de ir, lo mejor es averiguar si toman reservas y ahorrarse más de un dolor de cabeza.

Tip: El tiempo ideal para estar en Kona es una semana. Tiempo suficiente para visitar con tranquilidad todas sus propuestas.