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Amenazas del pasado





Publicado por Silvio
Estar de novio pero no convivir tiene una cuota muy conveniente de compromiso e impunidad. No sean malpensados, no hablo de una impunidad para hacer cosas malvadas, ilegales o incurrir en la infidelidad, pero la verdad es que tener tu propia casa te cubre de un manto de anonimato que te permite disponer de tus tiempos y hacer lo que querés.
Cuando convivís, perdés esa libertad. De alguna manera, tenés que reportar lo que hacés y lo que harás. Tenés que avisar y, aunque no lo hagas, ella lo sabe. Difícilmente puedas tener siquiera una pequeña llamada telefónica sin que ella esté al tanto (más si vivís en un 2 ambientes).
Todo esto lo digo porque hace unos días me llamó "la ex". Es una ex de hace muchos años, pero que cada tanto aparece, mete un llamadito, se pone al tanto y propone vernos. Todo pacífico, sin segundas intenciones, en absoluto. Pero sigue figurando.
Me llamó en un momento en el que estábamos mirando la tele juntos (ella tenía el control remoto, con lo cual seguramente veíamos un canal de aire), así que contesté con respuestas neutras, formales, que no dieran ningún indicio de quién estaba del otro lado de la línea, y liquidé la conversación en cuestión de segundos. Creo que ella se dio cuenta de que algo raro pasaba. Creo que mi ex se dio cuenta también. Ninguna de las dos dijo nada, y seguimos mirando la tele.
Aunque no había hecho nada, me sentía un criminal. Un criminal observado. Cada comentario que ella hacía lo tomaba como que estaba tratando de sacarme una confesión. Debe ser mi personalidad temerosa y perseguida, pero terminé confesando en tono falsamente casual: "Ah, ¿te acordás ayer que veíamos la tele y me llamaron? Era una novia de hace algunos años, quería saludar nomás". Ahí vino la catarata de preguntas. Creo que salí airoso de ese primer interrogatorio. También sé que vendrán otros.
Les pregunto, queridos lectores, ¿A ustedes también les ha pasado? ¿Qué hubieran hecho? ¿Debe uno confesar el acecho del pasado? ¿Acaso debe cortarlo de cuajo? ¿O lo mejor es callarlo, guardarlo para uno, y tomarse un cafecito con la ex? Necesito sus consejos.

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por Redacción OHLALÁ!


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