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Berlín tomó el pulso del turismo

La tendencia apunta a elegir productos no tradicionales

21 de marzo de 2004

BERLIN (EFE).-- Los amantes del turismo ya no se conforman con ciudades históricas ni playas paradisíacas, sino que buscan destinos cada vez más extraordinarios, productos específicos y ambientes capaces de producir sensaciones nuevas. Así lo ha demostrado la Feria Internacional del Turismo (ITB), que concluyó en Berlín y en la que participaron más de 10.000 expositores de 180 países.

"El turista se está haciendo cada vez más específico e individual", dijo a EFE Markly Wilson, director de Mercadotecnia y Turismo Internacional del estado de Nueva York.

"Los japoneses son un buen ejemplo de eso; antes viajaban en grupos grandes, pero ahora lo hacen solos o en pequeños grupos interesados en hobbies: observación de flores, trekking, bailes", agregó.

Para todos los gustos

El mercado da para todo y así lo muestra la oferta de la ITB: paquetes de viajes para la tercera edad, turismo sacro, circuitos musicales, observación de aves o animales, ofertas especiales para homosexuales, turismo astronómico, recorridos gastronómicos o enológicos, y un largo etcétera.

El mundo sin fronteras que ha promovido la globalización ha multiplicado las posibilidades para los viajeros, y eso ha hecho necesaria la innovación en los destinos.

"Los turistas europeos, especialmente los alemanes, han viajado tanto que nos preguntan qué podemos ofrecerles que sea totalmente nuevo", dijo Tania Pivcevic, representante de DAP Antártica, que ofrece vuelos y cruceros por el día al Continente Blanco. "El 76 por ciento de los alemanes que visitan Nueva York ha estado allí antes, pero quiere experimentar en la ciudad o sus alrededores en forma distinta; no buscan lugares, sino sensaciones", observa Markly Wilson.

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