Los festivales gauchos y cuadreras zonales suelen sumarse a no pocos desfiles gauchescos que en Navarro trotan frente a la plaza Mitre y al templo parroquial San Lorenzo Mártir (de 1870). Allí permaneció enterrado un año tras su fusilamiento Manuel Dorrego.
El casco histórico de la estancia El Talar, a menos de 200 metros de la ruta provincial 41, no está abierto al público (es propiedad de la Asociación Católica Irlandesa). Sobrevive tan deteriorado como el interés nativo hacia su propio pasado.
Se trata de lo que fue un rutilante edificio en U que encierra un patio y jardín -con aljibe, protegido de columnas y verjas- en cuya ala con portal y ventanales de reja, de cara al Este, pernoctó algunos días el general Juan Lavalle. Allí caviló su más terrible decisión: el fusilamiento de Dorrego.
Templete evocativo
Hoy, a escaso medio kilómetro hacia el norte de la tranquera de El Talar -lugar cercano a la laguna de Navarro- está habilitado el acceso público que lleva al monte donde se descargó la metralla apuntada al pecho del derrocado gobernador de Buenos Aires, el victorioso oficial que se destacó en los partes de Salta y Tucumán.
A escasos días del 173º aniversario del fusilamiento, la excusa evocativa sirve para una salida de campo. Existe un templete erigido en 1968, pero que permaneció cerrado 20 años.
Alberga escaso material evocativo: una cruz que se erigió en el lugar en 1936 y está habilitado los sábados, domingos y feriados, de 8.30 a 18. Desde allí se avista el casco que habitó Lavalle.
La laguna es el principal atractivo de esa comarca y ya era frontera cuando pasó Félix de Azara en revisión de fortines el 22 de abril de 1796.
El amplio camping municipal cobra 2 pesos a mayores de 10 años. Las carpas se instalan a razón de 5 pesos por noche y los servicios sanitarios de ducha caliente cuestan 1 peso.
Hay campings privados (Los Alamos y el Club de Pesca), 9 hoyos de golf de bajo green fee y, frente a las aguas y ruta 200 de por medio, el Aeroclub con diversos servicios de traslado.
Ñoquis, pero rellenos
Los pagos de Navarro, lugar de nacimiento de monseñor De Andrea, pero también residencia del pendenciero Juan Moreira -que en duelo criollo abatió a un tal Leguizamón frente al templo parroquial-, resultan un lugar ideal para comidas de campo y acopio de souvenires.
Desde hace 34 años reina La Lechuza (02272-420931) y más recientemente se agregaron La Bataraza (15-44770273) y El Rastro (02272-420285), todos fuera de la ciudad. Pero en el casco urbano vale la pena almorzar en el restaurante Buenos Aires, comedor de lo que fue el viejo hotel de las calles 24 y 11, de comida muy casera y económica (reservas por el 02272-420458).
A Navarro la llaman la capital provincial del tambo. Hay buenos talabarteros y antigüedades en Don Juan, de calles 11 y 32, y queso y dulce de leche, en Don Luciano (02272-430626) o en la granja El Sol (02272-420133).
Cómo se llega
Por el Acceso Oeste, con dos peajes de 1,50 peso hasta ruta provincial 6 que se toma hacia el Sur hasta la ruta 200. Esta se toma a la derecha, se pasa General Las Heras y se arriba a Navarro. La 200 flanquea el casco urbano y también la laguna. Al llegar a la rotonda de la ruta provincial 41, se toma a la derecha por 3 kilómetros para visitar el templete del parque Dorrego.
Francisco N. Juárez
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