
Me pasa cuando me reúno con mis hermanas, María y Clarita, siento como si finalmente estuviera completa y surge un poder imbatible. Somos tan distintas, pero a la vez encastramos, como esos juegos de cuando éramos chicas. Siempre salgo renovada de nuestros encuentros. Algo parecido me sucede cuando todo el equipo de OHLALA! se reúne con nuestra experta consultada de todos los meses, Inés Dates (coloquialmente llamada "nuestra psico"). Ayer fue uno de esos días, pensamos en salirnos de la rutina y dedicarnos un tiempo para distendernos después de un cierre matador. Elegimos un barcito nuevo de Palermo, Pierina Tea House, para desayunar cosas ricas, y comieron hasta las que estaban a dieta. (Miento: Ferni, nuestra productora de moda, se mantuvo firme frente al cheesecake y las tostadas). En fin, la cuestión es que me sentí plena de compartir una charla con mujeres tan inteligentes y sensibles.
"Círculos femeninos", recordé (nota que edité para este número de septiembre!) y entendí por qué esta revista me enamora: la sintonía entre mujeres puede detener el pulso cotidiano. No importa cuáles sean tus mambos o tus rollos, no importa si llegás justa a fin de mes o hay un familiar enfermo, no importa si estás soltera o tu marido te está volviendo loca. Cuando te reunís con tus amigas, compañeras, pares, hay algo que fluye y te empodera, todo es posible. Si querés cambiar el mundo, hacelo con mujeres. Y en eso estamos. Este espacio, es para que surja la mejor versión de nosotras mismas. ¿Te animás?
Se viene el finde, te propongo que llames a una amiga que hace tiempo no ves y la invites a tomar un té y el lunes me contás. Y mientras tanto… ¿cuáles son tus círculos femeninos?
Te compartos fotitos de nuestro encuentro de ayer.







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