Newsletter
Newsletter

Córdoba, escenario de película

De cómo un hecho inesperado inspiró a este director su próximo guión




Yo soy muy fóbico a los viajes, no voy a ningún lado, me cuesta mucho movilizarme. Tal vez en principio me dan ganas de ir, pero cuando llega el momento no consigo salir de mi casa.
Tengo una especie de rechazo por el traslado, y aunque en auto puedo ir a cualquier lado, a un avión no me subo ni que me maten. Ojalá existiera una ruta a Madrid.
Mi única reflexión es que a mi me gusta viajar sólo con la cámara, me gusta hacer mi propia road movie.
Y si bien me cuesta dar el primer paso, una vez que lo hago, generalmente me siento agradecido.
Hace cinco o seis meses, el prestigioso cineclub Hugo del Carril de Córdoba -para aquellos que no lo conocen es muy parecido al Malba- me insistió para que participara de una retrospectiva sobre mi obra, denominada Perrones de la calle. Y acepté.
A pesar de viajar en auto y amargarme porque el trayecto era larguísimo, hasta el punto que más de una vez pensé en dar la vuelta y regresar a Buenos Aires, una vez allá resultó una experiencia muy interesante.
Cada día, después de la proyección de mis películas, daba una charla en el primer piso del lugar para más de 50 espectadores, y fue muy gratificante por todo el afecto que me demostraron.
Jamás hubiera imaginado que el ciclo se convertiría en una especie de encuentro de fanáticos, de un público casi de culto que sabía mucho sobre mi vida y se había esforzado y viajado desde lugares distantes -había gente hasta del Chaco- sólo para conocerme.
En total fueron tres días, pero resultaron tan intensos que al recordarlo parece que hubiera transcurrido un mes completo.
Finalmente, la última noche antes de regresar a Buenos Aires, los organizadores realizaron un agasajo en uno de los tantos boliches de la ciudad, que tiene una vida nocturna bastante agitada.
Al llegar al lugar tropecé con un pibe de unos 10 años que trabajaba como abrecoches en la puerta del local, y curiosamente para mí me reconoció. Enseguida se levantó la remera para mostrarme un tatuaje que llevaba grabado con la palabra Graciadió (1997), título de una de mis películas. Esto me hizo pensar que algún día volvería a Córdoba para filmar, y a partir de entonces empecé a escribir el guión de mi próxima película. Seguramente se llamará Los pibes, y transcurrirá en la ciudad de Córdoba.
El autor es director de cine.
Por Raúl Perrone
Para LA NACION

¡Compartilo!

SEGUIR LEYENDO

¿Cuáles son los mejores lugares para probar este clásico postre italiano?

¿Cuáles son los mejores lugares para probar este clásico postre italiano?


por Redacción OHLALÁ!


 RSS

NOSOTROS

DESCUBRÍ

Términos y Condiciones


¿Cómo anunciar?


Preguntas frecuentes

Copyright 2025 SA LA NACION


Todos los derechos reservados.

QR de AFIP