URIBELARREA.-A 16 kilómetros de Cañuelas, este pueblo despertó de su modorra gracias al turismo. Y ahora multiplica las opciones para los visitantes.
Fue un importante polo lechero entre las décadas del 30 y 40. Uribelarrea llegó a tener cinco almacenes de ramos generales y cuatro escuelas; había clubes y bailes de gala; pasaba el tren lechero y había más de 50 tambos. Hoy resurge de la mano del turismo. Emprendimientos gastronómicos, lugares históricos y hasta una cabaña de sudación o temazcal de Marisa Morillo o Marisa de Uribelarrea, como se hace llamar su dueña, instalada hace 3 años, dan cuenta de una movida que crece, a 50 minutos de Buenos Aires.
Para llegar hay que tomar la autopista Riccheri y después la autopista Ezeiza-Cañuelas. Una vez en ese punto se sigue por la ruta 205 hasta el km 82,5, donde aparece el acceso al pueblo, a la izquierda.
Desde hace unos meses, se puede dormir en la Posta de Uribe. Y pronto se podrá comer en el nuevo restaurante Leonardo del complejo creado por José Luis Naccuchio, que ganó el premio 2005 de la revista Lugares como el personaje del año por su labor comunitaria en la zona.
La Posta de Uribe es una casa antigua reciclada que hoy cuenta con nueve habitaciones, todas diferentes, con camas King Size, aire acondicionado, música, televisión y frigobar. En un paraje tranquilo, casi solitario, los cuartos -cuyas puertas se mantienen como antaño- dan a la galería, con la pileta de natación a pocos pasos de la cama.
Desde las sillas del jardín, los huéspedes se solazan con los atardeceres maravillosos, con vista a los caballos del potrero lindero. La Santa Rita inunda con sus flores fucsias los cuartos iluminados por la alquimia del pasado.
Las comidas de los visitantes, que en general pernoctan los fines de semana, se hacen en los restaurantes del complejo -Macedonio, Wimpi y Leonardo-, pero los desayunos de pan casero y dulces de la escuela Don Bosco llegan directamente a las habitaciones.
El nuevo invento
El pueblo es tranquilo, espléndido para caminar y visitar la iglesia, donde se filmaron Evita y Juan Moreira, entre otras películas. O toparse con algún loco lindo en la plaza octogonal o en alguna de sus ocho calles convergentes o cuatro diagonales, resultantes del trazado original diseñado por el ingeniero arquitecto Pedro Benoit, el mismo que dibujó la ciudad de La Plata.
El restaurante Leonardo -llamado así en honor a Leonardo Da Vinci, artista italiano nacido en el pueblo toscano de Vinci en 1452-, cuya apertura está prevista para la próxima semana, posee un horno de leña de tres metros de diámetro. Fue realizado por el maestro Luciani, hornero de Berisso de más de 70 años, uno de los pocos fumistas que quedan de un oficio en peligro de extinción. Allí se prepararán especialidades italianas de un menú diseñado por los jóvenes cocineros Mariana Pagés y Luciano López Fuente, este último también dueño de dos restaurantes de una propuesta rica, sana y económica en el microcentro porteño, Momo y Platón.
En Leonardo se harán carnes como cordero, lechón; también empanadas, lasañas y todo lo que se pueda meter en este horno gigante y hermoso que custodia la cocina. Las vedettes serán las pastas, como los exquisitos ravioli di spinaci con pomodoro, entre otras.
La construcción del sitio es nueva, pero respeta las dimensiones propias de las casas de Uribelarrea de 1890. La vajilla fue recolectada en remates, como los cubiertos de alpaca y los platos antiguos. Las sillas fraileras y las mesas de madera dan cuenta de la sencillez de la propuesta: no hay lujo, pero sí contundencia culinaria.
"Carnes al horno presentadas como fiambre y pastas, manjares de influencia italiana, pero con los principios de la cocina moderna en cuanto a dietas equilibradas y cuidado de la salud sin mengua del sabor", contó López Fuente, asesor gastronómico del proyecto.
Leonardo completa la oferta gastronómica de Uribe con el resto de los restaurantes Macedonio -el pionero, por Macedonio Fernández-, con comida porteña, y Wimpi -por el escritor uruguayo-, la parrilla tenedor libre.
Los tres restaurantes se comunican entre sí por la parte trasera; es una manzana con patio arbolado donde algunos fines de semana se hacen conciertos. "La pasión oculta de Leonardo Da Vinci fue la cocina. Tanto es así que fue jefe de banquetes de Ludovico Sforza, dueño del restaurante La Insignia de las 3 Ranas, y luego cocinero de Francisco I, rey de Francia", contó el Dr. Eduardo Alvarez Tuñón, en su disertación Leonardo, cocinero y artista , con motivo de la ceremonia oficial de apertura del reducto gourmet el 25 de noviembre último. El estudioso basó sus afirmaciones en El libro de cocina de Leonardo Da Vinci .
En el Museo Leopoldo Rizzi hay herramientas y maquinaria agrícola para aquellos que quieran conocer la historia del pueblo fundado por don Miguel Nemesio de Uribelarrea en 1889.
Datos útiles
Cómo llegar
Por la ruta 205 hasta el kilómetro 82,5, donde aparece el acceso al pueblo, a la izquierda. Queda a 17 kilómetros de Cañuelas
Dónde comer
Leonardo : 35 pesos, con bebidas, por persona.
Macedonio : 35 a 40 pesos, con bebidas.
Wimpi : menú de 25 a 30, con bebidas.
Dónde dormir
La Posta de Uribe : por una habitación doble, con desayuno incluido, se abona desde 120 pesos por día.
Más información
En la calle Valeria V. de Crotto s/n, Uribe; 02226-493159.
En Internet
Por Silvina Beccar Varela