
Mis suegros me llamaron anoche para saber si podían pasar a buscar a los chicos hoy a la mañana.
Claro que pueden, pasen nomás.
Y así fue. Esta mañana los tres chicos se fueron con los abuelos, que llegaron todos temerosos. Como con miedo a que yo no los "preste" porque estoy separada de su hijo.
Nada más alejado. Mis chicos adoran a sus abuelos.
Nicolás me llamó anoche para darme más explicaciones. No sólo de por qué me dijo una cosa y luego hizo otra sino para llenarme de información: que yo no piense que está con una mujer. Que si quiero me pasa con Mongo (imagínense!!!!), que ya me va a mostrar las fotos.
Yo le dije que no necesitaba información. Y que él solo se había metido en todo esto, hablando más de la cuenta.
Me dijo que llega mañana y que, si me parece, le gustaría venir cuando los chicos duermen, a hablar conmigo. A seguir con la conversación que empezamos cuando volvió de Rosario.
Yo creo que sus intenciones son otras. Me parece que no es hablar lo que más busca.
Le dije que hablábamos durante el día.
Le tengo un poco de mierdo a la situation, para serles sincera. No sé cuántos "no" puedo decir.
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