Adivinen lo que hice.
Yo hoy tenía el día libre. Me levanté a las 6 AM y vi el día. Entré al cuarto de cada uno de mis hijos, los miré dormir y decidí que hoy nos quedamos todos en casa. La verdad, no faltan nunca. Yo sé qué muchos de ustedes no están de acuerdo con que de vez en cuando no asistan a clase sin más justificación que el deseo de malcriarlos un poco. Pero deberían haberlos visto recién. Los tres desayunando en mi cama, mirando una película.
Al mediodía vamos a amasar pizza y a la tarde se van con el papá.
Ayer a la noche me llamó una colega del consultorio para preguntarme si no quería que me presentaran un tipo que dice es perfecto para mí. Le dije: lo más perfectísimo del mundo para mí en este momento de mi vida, es estar sola. Me dijo "bueno, pensalo". Y claro, pienso.
La verdad, no creo PARA NADA que yo esté para conocer a nadie.
Sé que ustedes van a opinar lo mismo que yo.
¿O no?
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