

Con música de George Gershwin, las luces de Nueva York y un Manhattan en la mano, la vida parece más fácil. El personaje de la película homónima de Woody Allen podría haber incluido, en el célebre monólogo de la última escena, este y otros tragos entre las diez razones por las cuales la vida merece ser vivida.
El Manhattan es un cóctel que suscita tantas polémicas como el Martini, dos instituciones típicamente americanas sin parangón en otro lugar del planeta. La palabra cocktail se menciona por primera vez en The Balance, de 1806, donde se describe como "un licor estimulante, compuesto de cualquier clase de alcohol, azúcar, agua y bitter".
En 1608, Henry Hudson negoció con los indios lenapos que habitaban una isla sin nombre, después de haberles dado ginebra en abundancia. Ellos llamaron a esa tierra Manhachtanienk, que significa isla donde nos intoxicamos. Con el tiempo, el vocablo derivó en su nombre actual. El cóctel se hace con whisky de centeno. Algunos prefieren el Bourbon, pero los entendidos lo desestiman.
Para prepararlo, uno de los secretos es no batir los ingredientes en una coctelera sino revolverlos en un vaso mezclador con abundante hielo. Luego, hay que trasvasar el líquido resultante, ya frío, al vaso de cóctel, con el colador con gusanillo, que evita que los cubitos caigan en la pequeña copa. En su defecto, un colador normal o los mismos dedos hacen su cometido de la misma forma.
Dice la experta Sally Ann Berk que este aperitivo es considerado el antónimo del Martini. El primero se hace con whisky color ámbar, vermut dulce y una cereza y el segundo con aguardiente claro, ginebra o vodka y vermut seco. "Pero... ¿es la cereza lo opuesto a la aceituna?".
El trago es uno de los setenta y tantos clásicos considerados por la International Bar Association con la solidez y difusión suficientes como para tener nombre propio y fórmula estándar.
Si las manos del barman son mágicas, la alquimia de su seducción está asegurada. En un barcito perdido en un village de Manhattan, o en casa.
Cómo se prepara el Manhattan (*)
Ingredientes
- 6 partes de whisky de centeno o rye (90 ml.)
- 2 partes de vermut dulce rosso (30 ml.)
- 1 chorrito de bitter Angostura
- Hielo
- 1 cereza
Elaboración
- Mezclar todos los ingredientes menos la cereza en un vaso mezclador.
- Colar y servir en una copa de cóctel.
- Decorar con la fruta.
(*) Los mejores cócteles de Nueva York, por Sally Ann Berk
Silvina Beccar Varela
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