

-¿Cuál es la diferencia entre un turista y un viajero?
-El turista sabe cuándo vuelve. El viajero no; incluso no sabe si vuelve. El turista come todos los días. El viajero come todas las veces que puede. El turista se encuentra con turistas. El viajero con viajeros.
-¿En cuál de las dos categorías te ubicás?
-Hice viajes de turista y de viajero. A los lugares que hay que ir de turista fui de viajero. Y viceversa.
-¿Tres requisitos para unas vacaciones perfectas?
-Primero, la compañía. Segundo, libertad. Después, dormir, comer, conocer, aprender y divertirme.
-¿El mayor pecado de un turista?
-Decir frases como Ja, igual que en la Argentina , al ver que un micro sale en horario, por ejemplo.
-¿Qué hacés con tu perro o gato cuando te vas de viaje?
-No tengo perro ni gato. Y los viajes son una buena razón para no tenerlos.
-Como compañero de viaje... ¿cuántos puntos?
-Siete puntos.
-¿Por qué?
-No sé bien por qué, nunca viajé conmigo. ¡Bah!, una vez fui solo y me llevé bien... Aunque hay algo raro: me invité a ir otra vez solo y no acepté.
-Para viajar: ¿muy improvisado o del tipo planificador?
-Ahora, que viajo con mujer e hija, planifico. Trato de estar seguro de que las llevo y adónde las llevo.
-¿Qué es lo primero que te gusta hacer apenas llegás a un nuevo destino?
-Comer y salir a caminar.
-¿Playa o montaña?
-Una playa en la montaña
-¿Un buen libro para viajar?
-La Constitución Nacional.
-¿Y un disco?
-Cualquiera de Xuxa.
Sebastián Wainraich es actor y conductor de radio y TV. Los jueves de abril, a las 22, presenta Wainraich y los frustrados, unipersonal escrito e interpretado por él en Samsung Studio, pasaje 5 de Julio 444; 5533-5533.
CUANDO WAINRAICH CONOCIO A SALLY
En diciembre fui a Nueva York con un amigo. Almorzábamos en un simpático restaurante del SoHo. Una señora rubia comía a dos o a tres mesas de distancia. Pedimos la cuenta, y ella también. Nos paramos para ir a la puerta, y ella también. Estaba con dos hombres. Los cinco por fin llegamos a la vereda. La vi bien. Y ni pensé en ser cholulo. Lo fui. "Meg, I love you", le dije. "Me too", contestó con una dulce voz. Y nos sacamos una foto de pésima calidad. Y no, no le pregunté por la escena del orgasmo en Cuando Harry conoció a Sally.
SEGUIR LEYENDO


Lanzamos Wellmess, el primer juego de cartas de OHLALÁ!: conocé cómo jugarlo
por Redacción OHLALÁ!

Gala del Met: los 15 looks más impactantes de la historia
por Romina Salusso

Kaizen: el método japonés que te ayuda a conseguir lo que te propongas
por Mariana Copland

Deco: una diseñadora nos cuenta cómo remodeló su casa de Manzanares
por Soledad Avaca Cuenca
