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"No mezclo las giras con el turismo"

21 de agosto de 2011

-¿Te considerás una persona viajera?

-Absolutamente no, pero viajo.

-¿Qué es lo que más te entusiasma a la hora de partir?

-Pensar en los conciertos, obras de teatro y ropa también, por supuesto, que podré ver. También la posibilidad, hasta el último minuto antes de embarcar, de volver a mi casa y tirarme pancha en la cama con el teléfono desconectado.

-¿Agún ritual antes de salir?

-Asegurarme 14 veces que tengo la documentación en orden.

-¿Cómo se conjugan las giras teatrales con el turismo?

-Cuando hago turismo, hago turismo; cuando trabajo, trabajo, aunque sea en París. Me ha sucedido, y no puedo unir las dos situaciones. Envidio a los que pueden juntar ambas cosas.

-¿Un prejuicio que hayas derribado viajando?

-¿Derribar? Los prejuicios me derriban a mí.

-¿Qué hacés con tu perro o gato cuando te vas de viaje?

-No tengo. Pero mi hija me deja a su perro, Patán, cuando viaja. Es interesante observar la alegría que expresa al verme, ¡mucho mayor que la gente que me conoce!

-¿Un mercado que recuerdes especialmente?

-Il Mercato del Porcellino, cercano a la fuente del mismo nombre. ¡Y todo Florencia!

-¿Un museo?

-El Guggenheim, de Bilbao. El edificio en sí y una escultura de Richard Serra gigante, en hierro fundido, entre otras obras formidables.

-¿Un paisaje?

-Mi nieta Milagros, por su sabiduría excepcional.

Graciela Dufau es actriz y directora. Actualmente sigue de gira con Eva y Victoria, de Mónica Ottino, junto a Andrea del Boca. Este domingo 21 estará en Merlo; el sábado 27, en Resistencia, y el domingo 28, en Pte. Roque Sáenz Peña.

El dinero, a la basura

"Cuando gané el Molière, el premio era un pasaje a Francia. Antes de partir estaba sola en casa. Hugo (Urquijo) tenía el equipaje cerrado desde la noche anterior, listo y revisado. Cuando volví a revisar que no faltara nada antes de salir, no encontré el dinero por ningún lado. Ya tenía la nuca empapada y sentía taquicardia de tanto revolver. Imaginen, me puse a abrir valijas, di vuelta el placard, la casa entera, hasta

que ya desesperada recordé que lo último que había recorrido para dejar todo limpio y ordenado

habían sido los papeleros, así que fui directamente a la bolsa de basura y allí encontré el dinero."

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