Nuevas formas de entretener al pasajero durante el vuelo
Músicos en vivo y películas listas para ver vía Wi-Fi en dispositivos personales, entre otras estrategias para amenizar los viajes y también para disparar campañas publicitarias virales
16 de septiembre de 2012
NUEVA YORK.- No hace mucho, viajaba en el subterráneo de Nueva York cuando un hombre comenzó a tocar Lady of Spain en acordeón, mientras su amiga hacía sonar una pandereta y pasaba la gorra. No eran malos, pero el hecho es que me sentí parte de un público cautivo y me molestó, a pesar de que era un trayecto corto.
Imagínense el mismo tipo de espectáculo en un viaje en avión.
Tal vez me esté volviendo demasiado maniático, pero no me entusiasma mucho el programa de entretenimiento de Southwest Airlines, llamado Live in the Vineyard! (En vivo en el viñedo), que se presenta en su segundo año consecutivo. La compañía aérea lo describe como una manera de "revolucionar el concepto de entretenimiento en el aire. Un jet de Southwest se convierte en un escenario para espectáculos en vivo", afirman en la empresa.
Entonces, uno está sentado allí, metido en sus cosas, leyendo o mirando el iPad o lo que fuere, y de repente los artistas se levantan, toman sus instrumentos de los portaequipajes ubicados arriba de los asientos y montan un espectáculo. Justo en el avión.
"Subimos a estos artistas a nuestros aviones y sorprendemos a los pasajeros con recitales a bordo a más de 10.000 metros", explicaba una vocera de Southwest, Michelle Agnew, que sostiene que el programa es bien recibido. "¡A nuestros clientes les fascina!"
Los artistas, identificados con Live(AT) 35, forman parte de una agencia de publicidad asociada a Live in the Vineyard! , que organizan una serie de eventos musicales, culturales y culinarios que se realizan en la región vitivinícola de California. Diversos artistas en vivo aparecen en vuelos selectos de Southwest durante los dos meses previos al próximo encuentro, de tres días de duración, que se hará a principios de noviembre.
Según Agnew, así es como funcionan las actuaciones a bordo: "Un representante de Southwest hace un breve anuncio: Atención, tenemos algo especial para ustedes hoy, un espectáculo sorpresa que les brinda nuestra socia Live in the Vineyard! -dice-. La banda tocará dos o tres canciones, dentro de lo que permita la duración del vuelo. Es a través del sistema de megafonía, por lo que no será su experiencia más tecnológica, aunque sí, orgánica".
Como en el cine
Pues bien, como dije, soy maniático. Me gusta leer y trabajar en paz en el avión. Y dejando de lado el espectáculo en vivo, me interesa el enfoque global que hace Southwest con respecto al entretenimiento a bordo, en especial después de que muchos lectores reaccionaron ante otra de mis columnas sobre los pasajeros de vuelos internacionales que nunca van al cine, pero que todas las películas que ven las miran en las aerolíneas que brindan sistemas de alta tecnología con una gran selección de títulos a pedido.
Southwest, en cambio, trabaja con Row 44, una compañía que ofrece servicio Wi-Fi satelital a bordo e instaló ese sistema en alrededor de 300 Jets 737, más de la mitad de su flota. La compañía no ofrece pantallas en la parte posterior de los asientos.
Y los pasajeros que llevan sus propias laptops, tablets u otros dispositivos personales a bordo pueden pagar 5 dólares por las conexiones Wi-Fi. Mientras Row 44 y Southwest trabajan en el desarrollo de una programación patentada, y el sistema de esta última ofrece en la actualidad algunos canales de noticias y deportes, el enfoque de la aerolínea subraya una cuestión básica para la industria: ¿acaso los sistemas costosos empotrados en el respaldo de los asientos darán paso, con el tiempo, a los sistemas más sencillos en los que los pasajeros usen simplemente sus propios equipos móviles con conexión Wi-Fi?
Hay muchos aspectos que analizar, incluyendo las autorizaciones de contenidos y la piratería, antes que eso pudiera convertirse en norma. Uno de los problemas básicos es la disponibilidad limitada en la mayoría de las compañías aéreas de fuentes de alimentación eléctrica que permitan a los pasajeros cargar la batería de esos dispositivos personales.
Southwest no posee enchufes en los asientos, "pero contamos con las estaciones de carga cerca de las puertas, donde alentamos a la gente a que cargue sus equipos", comentó Whitney Eichinger, vocera de la empresa. "Cuando exploramos la posibilidad de prever Wi-Fi a bordo, surgieron muchos interrogantes sobre el entretenimiento durante el vuelo -agregó Eichinger-. Dijimos, vamos a poner televisores y otros equipos en los respaldos de los asientos, lo que desde luego requiere de una actualización, como cualquier tecnología, y también aumentará la carga de la aeronave.
"Entonces decidimos que la conexión Wi-Fi era la solución. Mucha gente trae sus equipos y es mucho más fácil actualizar la tecnología desde lejos sin tener todo ese peso extra en el avión que ocasionarían las pantallas incorporadas en los asientos y todo el hardware necesario para operar los sistemas."
Traducción de Andrea Arko