

Marta Raquel Mansilla, casera de la estancia Las Colas, en Gualeguay, provincia de Entre Ríos, sonríe apaciblemente. Junto con su marido, Mario Lezama, atienden a los viajeros que llegan al señorial casco entrerriano de fines del siglo XIX, a 240 km de Buenos Aires por la ruta 11.
La imponente casa de piedra cuenta con una galería que da al parque, enmarcada por seis columnas y dos canteros de coloridas flores. En su interior dispone de seis confortables habitaciones distribuidas en dos plantas, más un comedor y un living con TV.
Las paredes de los ambientes comunes ostentan hermosos cuadros de pintores locales y resumen calidez.
La diferencia de este sitio con otras estancias está en la sensación de posesión que invade al viajero: como no hay dueños a la vista, los huéspedes pueden sentirse como tales; se hace lo que ellos quieren y se los llama solamente para comer o servirles las colaciones.
Mario lleva a los turistas a andar a caballo si así lo requieren; si desean otra cosa y es posible cumplir sus deseos, sucede el milagro.
El parque, diseñado por Benito Carrasco, está bien cuidado, con estatuas y fuentes de época. Se destacan especies como lapachos, olmos, plátanos, álamos plateados, palmeras, magnolias gigantes, nogales y robles.
Un poco más lejos, la cancha de tenis con piso de cemento, la cancha de fútbol y el museo. En este último se puede ver una antigua máquina secadora y clasificadora de granos de arroz y otros elementos adquiridos por los actuales propietarios: una vieja balanza, una cocina económica, rifles vetustos, una silla de dentista...
Un poco de historia
En 1821, el vasco Juan Bautista Mihura llega a la Argentina; en 1904 adquiere 6000 ha de tierras cercanas a Gualeguay. De allí proviene el curioso nombre Las Colas, porque esa fracción era precisamente la cola del campo cuyo dibujo semejaba un animal.
Luego el terreno pasa a los hijos que se lo dividen, quedando asignada esta parte a Ramón Mihura, gobernador de Entre Ríos desde 1922 hasta 1926.
El siguiente dueño fue Alberto Fermín y más tarde Fernando Mihura (1970-1981), que lo vende a Juan Alvarez de Toledo (1981-1995) hasta que lo compra la empresa Salentein Argentina B.V., actual propietaria.
Hoy, la unidad productiva cuenta con 2557 ha divididas en tres fracciones: Las Colas, El Hocico y La Marta.
La ruta 11, el acceso a Gualeguay y a la estancia, fue construida en 1950: hasta entonces era una zanja donde desagotaba el agua de los campos.
Datos útiles
Sugerencias
Día de campo: $ 90. Por día, 24 horas con cuatro comidas y bebidas incluidas, con el vino Finca El Portillo, de bodegas Salentein, $ 200
Informes
Humboldt 2355, 1er. piso, Buenos Aires. 4776-6222,
Silvina Beccar Varela
SEGUIR LEYENDO


Lanzamos Wellmess, el primer juego de cartas de OHLALÁ!: conocé cómo jugarlo
por Redacción OHLALÁ!

Gala del Met: los 15 looks más impactantes de la historia
por Romina Salusso

Kaizen: el método japonés que te ayuda a conseguir lo que te propongas
por Mariana Copland

Deco: una diseñadora nos cuenta cómo remodeló su casa de Manzanares
por Soledad Avaca Cuenca
