¡Buen día!, ¿cómo amanecieron hoy? El otro día nos juntamos con Inés Dates, nuestra psico, que siempre es una fuente de inspiración para mí, y recordaba una frase que suele decirnos: "la mente registra más lo malo que lo bueno". Es una tendencia natural, un patrón mental. Allá hace tiempo, cuando vivíamos en chozas y nuestro marido era más un Pedro Picapiedras que un Pablo Echarri, la mente debía registrar lo negativo para protegerse, para cuidarse de cualquier peligro. Como fueron aquellos, los que vivían en alerta y a la defensiva, los que sobrevivieron; ese chip mental se mantuvo hasta el día de hoy.
Alguien puede decirte 10 piropos, pero basta que te diga una sola crítica negativa, para tirar por la borda los elogios y quedarte todo el día rumiando: "¿por qué me dijo eso?, ¡qué estúpido que es!, ¿debería haberle respondido?
Yo observo eso con el blog, este espacio para mí es la oportunidad de crecer y enriquecerme, así que primero gracias por estar ahí del otro lado. Mucha gente me dice: "uy, viste lo que pasó en el blog, las cosas que te dijeron", y yo elijo mirar las otras cosas, la cantidad de mujeres y varones que se sentaron frente a sus computadoras para construir, para compartir sus herramientas. Celebro esto. Si bien las malas noticias siempre salen en primera plana, yo elijo mirar el interior.
Además, cada uno tiene su rol en esta vida, si todos fuéramos unos fuma sahumerios, esto sería un embole, ¿no?
¿Qué piensan?
Para poner en práctica:
Fijate con qué situación negativa se quedó enganchada tu mente. Tomá conciencia, ese sólo hecho modifica el patrón mental y te libera. En breve se vienen más ejercicios de respiración, meditación y yoga.