Newsletter
Newsletter

Todo es más ruso en invierno

Por Andrés Moulins




A pocos turistas se les pasa por la cabeza viajar a Moscú en enero. En 1812 unos 19.000 soldados de Napoleón no soportaron las bajas temperaturas y murieron. 734.000 fueron los soldados de Hitler que sucumbieron ante el invierno ruso entre 1941 y 1942.
Pero en 2011 es muy grato vencer al general frío y experimentar la Rusia Blanca. Caminar por las nevadas calles de Moscú en enero es fascinante. Uno puede observar cómo el típico moscovita se dirige a su trabajo, cómo los niños y adolescentes van a sus escuelas. No hay turistas que rompan esa postal, no hay llamativas prendas de orientales con flashes incorporadas?
¿Qué debemos tener en cuenta? El alfabeto cirílico no es una barrera, es un condimento. Casi ningún cartel está transliterado con caracteres latinos (como sí sucede en Grecia o en turísticas ciudades de Medio Oriente). Lo apasionante es el constante desafío intelectual de intentar entender qué significarán las palabras dependiendo de los rubros comerciales, de cuánto se repiten, dónde? No hay dudas de que la mente se ejercita más recorriendo Moscú que bronceándose en una playa del Caribe.
Una cita inevitable en Moscú es cada estación de metro: son genuinos palacios subterráneos. ¿Cuándo mejor que en invierno para recorrer Moscú por debajo?
Que la capital de Rusia sea la ciudad más cara del mundo no es algo que los turistas notemos (sí lo notan los locales, que tienen un costo de vida muy alto), sus precios son comparables a los de cualquier capital europea.
Pequeños consejos: echarle una mirada a la equivalencia de letras de los alfabetos cirílico y latino, al menos, para poder leer y pronunciar nombres de calles o estaciones de metro. Llevar ropa térmica es una necesidad vital: ropa interior y medias (las temperaturas pueden descender a los -15°C hacia la noche). Prestar mucha atención en el momento de cruzar las calles (a las avenidas se las cruza a través de pasajes subterráneos).
Pros de Moscú en invierno: 1) los edificios nevados son incomparables. 2) Todo es más ruso en invierno. 3) No hay que hacer colas ni esperar en museos o galerías.
Contras: 1) la ciudad no está lista para personas con movilidad reducida. 2) Son muy resbaladizas las veredas con nieve congelada. 3) El idioma es un obstáculo: cuando no hay turistas en Rusia, no hay presencia de otra lengua que no sea la rusa. Muy pocos moscovitas hablan inglés.
Definitivamente, el invierno ruso nos deja ver (en sus pocas horas de luz) cómo es la Rusia que todos imaginamos: la del Doctor Zhivago y la de Ana Karenina y no una occidentalizada ciudad servida para turistas.

¡Compartilo!

SEGUIR LEYENDO

Lanzamos Wellmess, el primer juego de cartas de OHLALÁ!: conocé cómo jugarlo

Lanzamos Wellmess, el primer juego de cartas de OHLALÁ!: conocé cómo jugarlo


por Redacción OHLALÁ!

Flor Jazmín Peña mirando hacia arriba y posando para la tapa de OHLALÁ! con una porción de la sandía entre las manos

 RSS

NOSOTROS

DESCUBRÍ

Términos y Condiciones


¿Cómo anunciar?


Preguntas frecuentes

Copyright 2022 SA LA NACION


Todos los derechos reservados.

QR de AFIP