Un micromundo llamado Costa do Sauipe

Parte de una estrategia de marketing, la competencia ofrecía vivir el sueño de muchos: instalarse en un resort por seis meses y vivir para contarlo a través de las redes sociales. "La mayoría no entiende bien mi trabajo, pero es mucho. Estoy todo el tiempo recorriendo los hoteles, sacando fotos, filmando y contando todo eso en el blog del complejo", explica Guilherme, de 29 años. Pero no se queja. Atrás dejó la estresante vida de la ciudad y sus tres trabajos en San Pablo, para cambiarlos -previa elección entre 254 participantes, al mejor estilo reality show- por hacer de huésped 24/7.

La historia de Guilherme es digna del paraíso de fantasía que recrea Costa do Sauipe, un gigante compuesto por cinco hoteles y cinco posadas, que suma más de 1500 cuartos y tiene una estructura de miniciudad que incita -u obliga- a no moverse de sus límites. Como si la felicidad de las vacaciones pudiera concentrarse dentro de la escenografía montada de este gigantesco resort que, dicen, es el más grande de América del Sur.

Los atractivos están pensados para toda la familia y la playa es sólo un detalle. Hay piscinas con animadores, salas de juegos, centro de recreación para niños y guardería, golf, tenis, cabalgatas, spa y hasta un lago artificial donde se puede pescar, hacer kayak y tirolesa. Como si fuera poco, la Vila Nova da Praia oficia de centro urbano de este micromundo, con tiendas, restaurantes y espectáculos en vivo que arrancan a las 18, cuando ya es de noche -razón por la que vale la pena madrugar para aprovechar el sol, que sale a las 5-. A las 23.30 se termina el show, pero se puede seguir bailando hasta entrada la madrugada, en la disco del hotel, Sauipe Club. Allí seguro aparecerá Guilherme para brindar con algún trago multicolor e inmortalizar la noche con alguna foto para su blog.

Costa do Sauipe bien podría fijar su eslogan como la meca del all inclusive. A 76 kilómetros al norte del aeropuerto de Salvador de Bahía es, históricamente, uno de los grandes preferidos del público argentino. Pero desde 2009 lleva este nombre y es propiedad 100% brasileña. Antes, sus cinco hoteles eran administrados por cadenas internacionales como Marriott, Sofitel y otras.

Hoy, sólo el Sauipe Premium lleva la categoría de cinco estrellas, y el resto se divide en hoteles confortables y similares entre sí, en tarifas y estilo, con distintos nombres que comienzan con Sauipe: Club, Fun, Park y Class. Además están las posadas -que no ofrecen servicio todo incluido, pero funcionan como aparts-. Para su remodelación, el gobierno brasileño invirtió cerca de 30 millones de reales, a lo que se sumaron más de 13 millones para la que será la novedad de 2013, cuando en junio se inaugure el gigantesco Arena Sauipe, el centro de convenciones que se está construyendo especialmente para el sorteo de las llaves de la Copa del Mundo 2014 de la FIFA.

Los huéspedes pueden movilizarse dentro del complejo en buses internos, bicicletas o carritos de golf, el transporte más elegido en esta ciudadela oficial del veraneo que confunde: pocos lo saben, pero se encuentra dentro del municipio de Mata de Sao Joao -el mismo que alberga a la vecina y más natural Praia do Forte-. Costa do Sauipe es el nombre de fantasía para las 172 hectáreas donde siempre es tiempo de vacaciones. Excepto para Guilherme, claro.