Una semana a pura vela
El Circuito Atlántico Sur Rolex Cup volvió a reunir a casi un centenar de embarcaciones en una verdadera fiesta náutica
25 de enero de 2008
Como sucede cada enero desde hace más de una década, los veleros volvieron a adueñarse, la semana última, de las aguas de la península. Es que, una vez más, Punta del Este recibió el Circuito Atlántico Sur Rolex Cup, una de las más importantes competencias de yachting para barcos de fórmula del hemisferio sur y, sin duda, la de mayor trascendencia en el ambiente náutico vernáculo.
Y fue una verdadera fiesta de la vela, que tuvo como principales invitados a más de 70 embarcaciones de la Argentina, Uruguay y los Estados Unidos (participó el maxivelero Rambler, nave de 90 pies de eslora de gran renombre internacional), que disputaron siete regatas (entre estas, la tradicional Olivos/Buenos Aires-Punta del Este) en un ambiente de competencia y con un marco inmejorable como las costas esteñas para la realización de este tipo de pruebas.
Y este año, el campeonato, que estuvo organizado por el Yacht Club Argentino, el Yacht Club Olivos, el Yacht Club Punta del Este y el Yacht Club Uruguayo, con el auspicio de Rolex, tuvo todos los elementos que se les pueden pedir a los festivales náuticos: un alto nivel deportivo, excelentes embarcaciones y condiciones climáticas diversas y cambiantes, y hasta la presencia de figuras de la realeza, ya que el príncipe Alois, de Liechtenstein, corrió la última regata a bordo del barco uruguayo LGT-Memo Memulini, de Ricardo Fabini.
En lo más alto del podio se colocaron los veleros Mercenario 4, de Luis Silva, en la fórmula ORC Internacional; el Toribio Achával Propiedades-Matrero, de Toribio de Achával, en ORC Club y el Abbey Sea-Baccarat, de Esteban Kallay, en IRC.
Pero eso no fue todo en materia náutica en las costas del este, ya que anteayer comenzó la Semana de Clásicos 2008 por la Rolex Cup.
Se trata de una competencia innovadora y de características muy especiales, ya que por primera vez se intenta reunir en un mismo campeonato a las embarcaciones clásicas -comparándolas con automóviles serían aquellos considerados de colección- de nuestro país y del Uruguay con el fin de volver a darles a esas verdaderas joyas del diseño y la construcción naval el protagonismo que tuvieron hace décadas en el yachting nacional y mundial.
Quienes quieran disfrutar del magnífico espectáculo que brindan estos viejos barcos de madera con sus amplios velámenes desplegados, no tienen más que acercarse a la zona de La Mansa y verlos en plena competición, cuando hoy y pasado mañana, desde las 13, corran las regatas Circuito Solanas y la Vuelta Gorriti, respectivamente.
Como si fuese poco, mañana, también en la zona de La Mansa, se correrá la regata Royal & Sunalliance para barcos de fórmula, que organizará el Yacht Club Punta del Este.
Un espectáculo atrapante que vale la pena presenciar.