Recorrido: dónde comer la mejor pasta de Buenos Aires

En cada rincón de este ristorantino y despensa creado por Donato de Santis se respira Italia, y se pueden palpar sus costumbres y sus platos más representativos . Con la premisa de difundir el respeto por las tradiciones y el amor por la buena mesa, el reconocido chef nacido en Milán decidió montar un local que ofreciera platos clásicos italianos, pero siempre acompañados de productos de estación. Las pastas se elaboran en el medio del salón y, por supuesto, se llevan todas las miradas.

Nuestro favorito: los orecchiettes ($369) son el plato estrella y el más representativo de La Puglia, donde se crió Donato. La receta es de su abuela, se elabora con sémola italiana y se sirve con brócoli.

Maridaje: Antonio Mas Núcleo Chardonnay 2017; gracias a su frescura, potencia muy bien tanto la pasta como el brócoli ($389).

El dato: hay otra sucursal en Palermo y un nuevo local en el Mercado de Belgrano.

Dónde: Castañeda 1873, Belgrano.

IG:cucinaparadisoba .

En una ochava súper luminosa de Recoleta con grandes ventanales, este bar de pastas está abierto desde la mañana hasta la medianoche y propone que puedas disfrutar de platos de la cocina italiana en un ambiente descontracturado y a toda hora. Comandado por el chef Alejo Waisman, el menú de pasta "fatta a mano" abarca desde pappardelle o fusilli hasta pastas rellenas como tortelloni y agnolottis. De postre, hay helados hechos en el momento y un gran tiramisú.

Nuestro favorito: los tagliolini con tomate y albahaca ($165). Son similares a los tagliatelle, pero estos tienen forma cilíndrica, y acá los ofrecen con cuatro salsas diferentes.

Maridaje: Luigi Bosca del Alma, un blend fresco y elegante elaborado con cinco tipos de uvas blancas ($500).

El dato: tienen otra sucursal en Palermo y no cobran cubierto. Además, hay brunch los fines de semana.

Dónde: Ugarteche 3208, Recoleta.

IG: il_quotidiano.

La historia de La Alacena comenzó hace cuatro años de la mano de las chefs Mariana Bauza y Julieta Oriolo, dos jóvenes emprendedoras que le pusieron su sello a este cálido restaurante. Ubicado en la esquina de Gascón y Honduras, rápidamente se convirtió en un rincón imperdible para los amantes de la cocina ítalo-argentina. El menú ofrece diferentes versiones de los platos típicos italianos y pastas elaboradas con sémola italiana y huevos de campo.

Nuestro favorito: Tagliatelle Alfredo ($295), con parmesano, crema, mascarpone y cavolo nero (una variedad de kale de origen italiano).

Maridaje: Animal Jardin Enchanté ($209), un rosado de malbec orgánico. ¿Lo mejor? Viene en botellita de 500 ml.

El dato: la propuesta se completa con La Panadería de al lado, con todo tipo de panes y dulces.

Dónde: Gascón 1401, Palermo.

IG: laalacenacafebazar.

Un Little Italy en pleno Recoleta. El chef y mentor de este restaurante es Daniele Pinna: nacido en la isla de Cerdeña, llegó a la Argentina en 2010 y es de esos "locos lindos" que están atentos a cada detalle y siempre dispuestos a convertir una comida en una verdadera experiencia gastronómica por su tierra natal. Te vas a encontrar con las clásicas recetas de la cocina italiana tradicional, pero con giros modernos y en porciones generosas, siempre apostando por ingredientes de estación.

Nuestro favorito: norma al forno. Típica de Sicilia, es una pasta gratinada al horno, con berenjenas y ricota. Otra de las estrellas de la carta es el Ravioli Lunghi: un raviol gigante relleno de ricota y hongos.

Maridaje: Primogénito Pinot Noir, toda la elegancia y sutileza patagónica ($340).

El dato: muchos de sus ingredientes son traídos de Italia, como la sémola de grano duro que se utiliza para la elaboración de las pastas.

Dónde: José León Pagano 2697, Recoleta.

IG: lalocandaristorante.

Es un clásico de Villa Crespo que logró trascender las fronteras del barrio con una publicidad infalible: el boca en boca. Si bien este restaurante con estética retro de almacén tiene propuestas clásicas, se destaca por sus innovadoras salsas y sus más de 15 opciones de pastas rellenas caseras: la especialidad de la casa. Se llena, así que tratá de ir temprano o reservar con tiempo. Y no te vayas sin probar alguno de los postres, como para terminar de rematar: la torta húmeda de chocolate se pasa de rica.

Nuestro favorito: los canelones de brócoli y champiñones con crema de hinojos ($225) pelean mano a mano con los ravioles de batata y almendras ($190). ¡Imposible elegir uno!

Maridaje: las pastas rellenas piden un vino power como el Kaikén Ultra Cabernet Sauvignon ($390).

El dato: con 4 días de anticipación, podés encargar pastas frescas y retirarlas por el local.

Dónde: Juan Ramírez de Velasco 401, Villa Crespo.

IG: salgadoalimentos.

A pocos metros del Congreso, en la sede de la Associazione Nazionale Italiana, te vas a encontrar con este restó con clima familiar especializado en cocina calabresa, que tiene como ingredientes más característicos la oliva, el jamón crudo, la berenjena, el ajo y la canela en todos los dulces. Atendido por sus dueños, se destaca por un menú único ($640 por persona, sin bebidas ni café) que cambia todos los días y que incluye, literalmente, de todo: entre 12 y 14 antipastis, un primer plato con dos tipos diferentes de pasta (rellena o fresca), un segundo plato y tres variedades de postres.

Nuestro favorito: los torteletis de ricota y borraja (una planta de las zonas mediterráneas similar a la espinaca) son uno de los preferidos del menú.

Maridaje: Chakana Nuna Estate Syrah, un vino versátil que se amolda a todos los platos ($290).

El dato: todo viene en fuentes para compartir.

Dónde: Adolfo Alsina 1465, Monserrat.

IG: mariafedeleristorante.

(Rinde 6 porciones).

Ingredientes: 1 kg de tomates perita enteros en conserva / 2 cebollas cortadas súper finas en pluma / 3 dientes de ajos fileteados finos / 1/4 de taza de aceite de oliva / 1 bouquet garni con romero, salvia, laurel y tomillo. Peperoncino / Albahaca fresca / Sal

Tip: para que evapore la acidez, siempre es mejor poner primero el jugo de tomate.