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Averiguá quién sos en el eneagrama

El eneatipo es una suerte de mandala que te ayuda a descubrir tus claroscuros y expandir tu conciencia.




Aprovechamos el número de nuestro cumpleaños –que es uno de los más sagrados– para repasar esta herramienta que establece las nueve (enea) líneas (grama) básicas de una estructura psicológica fundamental: es decir, nueve estilos básicos de personalidad, o “eneatipos”, con sus luces y sombras.
Para cada tipo de energía hay una fijación (creencia no cuestionada sobre vos, tu entorno y el mundo), una pasión (emoción inconsciente o humor cotidiano) y una idea trascendente, como resultado de observar y disolver nuestra fijación. ¿Querés descubrir esos “automáticos” con los que percibís el mundo? Buscá tu eneatipo y conocete más a fondo.

1. La reformadora

Para vos, el mundo es un caos. Y según tu punto de vista, vos venís a ordenarlo. “Acá vamos a hacer las cosas como corresponde”, es tu lema. Eso sí, nunca vas a decir que tu parámetro es tu criterio, sino que lo vas a disfrazar de algo objetivo. Manifestás tu enojo casi siempre de modo indirecto, con gestos o ironías.
Fijación: crítica.
Pasión: ira.
Idea: “todo es perfecto”.

2. La ayudadora

Sos la “Venus del eneagrama”. Buscás seducir generando cierta dependencia emocional: que el otro te muestre que sos valiosa. “El mundo me necesita”, es tu lema. Sos simpática, muy femenina, sensible y contenedora. Peeero... tu orgullo te impide pedir ayuda. Atenti, porque a veces el único modo que encontrás de hacerlo es enfermándote.
Fijación: generosidad egocéntrica.
Pasión: orgullo.
Idea: “me conecto con el universo”.

3. La triunfadora

Buscás la eficiencia. Sos muy controlada y te importa estar impecable. Al punto de no saber muchas veces lo que vos misma querés. Desde chiquita hiciste danza, idiomas, y sos buena estudiante, mamá responsable, empleada ejemplar y la reina del Instagram. Te cuesta relajarte y muchas veces ponés tus emociones en segundo plano.
Fijación: engaño.
Pasión: vanidad.
Idea: “en lo diverso hay armonía”.

4. La romántica

Sos muy sensible y te atraen lo intenso y las emociones profundas. Te solidarizás con el sufrimiento ajeno y a veces sacás más fuerza de la adversidad que de la alegría. Solés sabotearte a vos misma. Cuando te atrapa la melancolía, te sentís carente, defectuosa, y manifestás tu malestar con quejas y lamentos. ¡Toda una drama queen!
Fijación: insatisfacción.
Pasión: envidia.
Idea: “todo remite a un origen”.

5. La observadora

Mirás el mundo desde el punto de vista objetivo. Sos perfeccionista en el plano de lo mental y focalizás en el área donde te sentís experta. No te gusta meterte en un terreno ajeno. Tampoco te copan demasiado las actividades físicas. Tu tiempo es escaso y lo tenés que cuidar. No te sentís cómoda con los eventos sociales.
Fijación: aislamiento.
Pasión: avaricia (con tu tiempo).
Idea: “todo está conectado”

6. la guardiana

Sos desconfiada y suspicaz. Tenés la guardia alta y sentís que tu misión es defender a todos de los peligros del mundo. Tendés a agredir verbalmente a los demás cuando te sentís acusada. Sos de sentir mucha culpa y temés las consecuencias de tus actos. En el conflicto, apoyás a los más débiles manifestando gran fortaleza.
Fijación: duda.
Pasión: temor.
Idea: “puedo confiar en el ser".

7. La entusiasta

Siempre buscás lo positivo y no te gusta caer en la monotonía. Estás siempre viendo lo que viene. No sos consciente, pero hay una ansiedad interna que te lleva a adelantarte por miedo a sentirte limitada por las circunstancias. “Yo debo tener múltiples opciones siempre”, es tu lema. Contagiás optimismo, pero solés evadir el dolor.
Fijación: planificación.
Pasión: gula (picoteo).
Idea: “en el cambio hay un sentido”.

8. La jefa

Considerás que el mundo es una jungla; si bajás la guardia, los demás se van a aprovechar. “Yo soy la que manda”, es tu lema. Con vos no van las sutilezas ni lo romántico. Sos súper intensa (¡y no solo en el sexo!). Preferís lo directo o lo crudo y no te bancás que te manipulen. Sos un punto de apoyo para los demás.
Fijación: venganza.
Pasión: lujuria.
Idea: “la verdad es la unidad”.

9. La pacificadora

Para vos, lo más importante es estar tranquila. Sos la generosa que no pide nada a cambio. “No soy tan importante”, es tu lema. Pero ojo con sobreadaptarte y resignarte, incluso a lo que sentís. Cuando empezás a hacer cosas, no podés parar; y cuando te detenés, te cuesta volver a arrancar. Te gustan las cosas a tu ritmo.
Fijación: inercia.
Pasión: pereza.
Idea: “amar es hacer el bien”.

hacé el test

Entrá a eneagrama.personarte.com y contestá las 135 preguntas que ahí se proponen. Tené en cuenta que tus respuestas deben considerar tu modo de ser durante los últimos cinco años. Y también tené mucho cuidado de ser honesta con vos misma. Es decir, contestar por lo que sos y no por lo que te gustaría ser. Para eso, un consejo fundamental es pensar qué diría alguien que te conoce muy bien (tu mamá, tu pareja, tu mejor amiga...). La premisa es animarte a ver lo que hay para ver, no solo lo que estás dispuesta a aceptar de vos misma.
Para leer: Eneagrama Esencial, de David Daniels y Virginia Price (Urano, $315).
Experto consultado: Marcelo Aguirre, Lic. en Psicología.Miembro de la Asociación Argentina de Eneagrama.

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