Glowy skin: la guía completa para tener una piel luminosa todo el año

La piel glowy no es solo una moda. Se trata de una piel hidratada, luminosa, de textura suave y sin exceso de maquillaje. El glow es una consecuencia directa del bienestar general: una alimentación equilibrada, buena hidratación, descanso, actividad física regular y protección solar adecuada.

Una piel luminosa no es sinónimo de piel perfecta, sino de una piel cuidada y consciente. Adoptar hábitos saludables es la base para lograr ese efecto radiante que se nota incluso sin maquillaje.

Un primer o prebase es un producto normalmente traslúcido que ayuda a preparar la piel antes de la aplicación de la base de maquillaje. Dependiendo de la piel, este producto logra difuminar poros y eliminar brillos para las pieles mixtas y grasas. Además, es la hidratación perfecta para las pieles secas e incluso con corrección de color para las que sufren de rosácea. Pero esa no es su única función, crea una base suave que hace que el maquillaje se adhiera, dure más tiempo y que aparezcan menos brillos durante el día.

Hace unos años, la tendencia en maquillaje se enfocaba en una piel mate y sin rastros de luz. Ahora, la dirección cambió completamente y el objetivo es resaltar una piel jugosa, hidratada y luminosa que se logran en tres simples pasos:

1. Limpieza: El primer paso es la limpieza. Esto es fundamental para que la piel respire y los productos actúen de manera efectiva.

2. Hidratación y nutrición: Dependiendo del tipo de piel, se recomienda una crema hidratante o nutritiva. Además, los sueros son esenciales para una piel madura, ya que penetran en capas profundas.

3. Protección solar: Es el paso que nunca debe faltar, sin importar la edad o la estación del año. 

• Alimentación equilibrada: frutas, verduras, pescado y lácteos en primer plano; menos ultraprocesados, grasas y azúcares.

• Agua, agua y más agua: al menos dos litros por día para hidratar desde adentro.

• Rutina facial inteligente: limpieza, vitamina C, hidratación y protector solar.

• Tratamientos estéticos puntuales: según tu tipo de piel y bajo supervisión profesional.

La maquilladora Carol Hartridge (staff de Bettina Frumboli) nos compartió el paso a paso para un look glowy de verano, fresco y con ese efecto "recién vuelta de la playa":

1. Preparación: aplicá crema o sérum hidratante. Si tenés piel oleosa, sumá un primer matificante en la zona T.

2. Base ligera: usá una base fluida o mezclá tu base habitual con tu hidratante para aligerarla. Aplicala de forma muy sutil.

3. Correcciones puntuales: con corrector solo donde lo necesites (ojeras, manchas).

4. Bronzer y rubor: aplicá bronzer en contornos del rostro y rubor generoso en mejillas y nariz. Difuminá bien.

5. Iluminador: si te gusta más glow, sumá un iluminador en pómulos, lagrimal, arco de cupido y punta de la nariz.

6. Ojos destacados: delineado sutil con sombra (mejor si es difuminado), máscara de pestañas y cejas peinadas.

7. Labios jugosos: delineá con lápiz nude y aplicá gloss o bálsamo con color en el centro.