Adiós al minimalismo: esta es la tendencia deco que vimos en Casa FOA 

1 - Atelier. El espacio del decorador Ramiro Arzuaga, junto con las arquitectas Daniela Fiumara y Verónica Biscayasaqu, ganó el premio a la mejor interpretación de la temática. Y es que resume al maximalismo de la mejor manera con escenas que celebran la abundancia. El espacio sorprende y envuelve con el color de sus paredes, lo escenográfico de sus textiles, el valor del arte y los objetos con historia. 

2 - Espacio de hotel. Siempre audaz, Gaby López Monzón, de C´est Moi, presenta un espacio cargado de geometrías y colores vibrantes. Tiene una mezcla perfecta entre el art déco de los años cincuenta y las tendencias de hoy. La diseñadora se inspiró en la estética detallada del film El gran Hotel Budapest, de Wes Aderson, que se destaca por su precisión visual y sus colores. 

3 - Departamento de lujo. Otra obra del maximalismo, de Oscar Gil, Florencia Basile y Gisela Bezek, del Estudio Fontenla. Tiene todo: revestimientos envolventes, mix de texturas, colores sofisticados y muebles orgánicos de maderas oscuras, que respiran elegancia. La iluminación y el arte tienen el poder de transformar la escena y, en este dormitorio, le dan un carácter casi teatral. 

4 - Sala de baño. La propuestade Eder Villarreal y María Ramos, de Proyeco, junto con la dupla de Gilligan´s deco, lograr generar un alto en el camino. Es casi un laberinto, que invita a descubrir rincones que sorprenden por sus formas, colores y esas flores preservadas que se roban las miradas. Tiene algo del diseño oriental, pero llevado a su máxima expresión. Es un claro ejemplo de que el maximalismo puede mantener la calidez y generar armonía, en otra escala. 

 

5 - Living. Maximiliano Solar estimula los sentidos con este living que no tiene límites. Tiene una caja oscura, muebles bien grandes y arte que explota en cada rincón. Un sillón oversize recorre todo el ambiente y seduce con su naranja esponjoso. Para el resto, usó colecciones de arte, música y objetos de vanguardia que no pasan desapercibidos. El plus: las líneas negras que cruzan sobre el blanco.  

1. Los muebles claros y de líneas simples dan paso a piezas grandes, oscuras y orgánicas 
    
2. Las paredes blancas piden colores vibrantes, en pinturas, empapelados y revestimientos de distintos materiales
    
3. Se suman los cortinados pesados, las alfombras persas y la mezcla de texturas, bien suaves al tacto 
    
4. Los objetos de colección y el arte, en todas sus dimensiones, ganan terreno 
    
5. La iluminación se vuelve escenográfica y se presenta en distintos planos 

Bonus: recordá que, en la deco actual, todo vale. Lo importante es que tu casa hable de vos, con la sencillez de lo mínimo o la riqueza del maximalismo. ¿Cuál elegís?

Por Soledad Avaca Cuenca @soleavaca