Viruela del mono: ¿a quiénes está afectando?
En Argentina ya se contagiaron 1025 personas, y hoy, se confirmó la segunda muerte.
10 de enero de 2023
Viruela del mono: aumentan los casos - Créditos: Archivo LN
El 23 de julio pasado la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la emergencia con respecto al brote actual de viruela del mono, debido a la rápida diseminación y al aumento de los casos reportados: ya hay más de 50.000 en todo el mundo. En nuestro país los casos confirmados ascendieron a 1025, y hoy se confirmó la segunda muerte.
A fines de noviembre fue notificada la primera víctima fatal de viruela del mono en Argentina: un hombre de 44 años que tenía diagnosticado VIH sin tratamiento y se encontraba internado en terapia intensiva en la ciudad de Buenos Aires.
“Si bien es una enfermedad que se conoce desde hace muchos años, es nueva en Argentina”, sostiene Laura Yantorno, médica especialista en infectología y magíster en prevención y control de zoonosis.La especialista forma parte de la comisión de enfermedades endémicas y emergentes de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) y señala que la viruela del mono se transmite de animales a humanos, a través de arañazos o mordeduras.
Se detectó por primera vez en colonias de monos criados para investigación en 1958. Y recién en 1970 se detectó en humanos. Es una enfermedad endémica en países de África central y occidental. Esporádicamente se reportaban casos en otros continentes, de personas que habían viajado y se habían contagiado. Pero el brote actual es el más grande de la historia fuera de esa región, por eso encendió las alarmas.
Síntomas de la viruela del mono
La viruela del mono tiene un período de incubación de entre 7 y 21 días. Una vez que aparecen los síntomas, el cuadro es bastante característico. Existe una primera fase, llamada “prodrómica”, en la que aparece fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, cansancio y ganglios cervicales y submaxilares.
A esta etapa le sigue la fase exantemática, que es cuando aparecen las lesiones cutáneas. Primero son manchitas, que se van transformando en pápulas y luego en vesículas que se ulceran, hasta que finalmente se forman las costras. A diferencia de las lesiones que provoca la varicela, las de la viruela se presentan todas en el mismo estadío al mismo tiempo.
Estas manchas pueden aparecer en la cara y en el resto del cuerpo. Y en ocasiones suelen ser muy dolorosas: “Uno de los motivos de consulta es el dolor que generan las lesiones en la zona anal o perianal, que muchas veces motivan la internación para calmarlo”, detalla la especialista.
Cómo se contagia la viruela del mono
El contagio se produce cuando hay un contacto cercano y prolongado con una persona enferma, a través de las gotitas salivales por la vía respiratoria, de las lesiones cutáneas o por compartir ropa de cama y toallas. Las personas contagian desde que empieza el cuadro febril hasta se caen las costras y aparece la piel sana, período que dura unas cuatro semanas.
Hasta el momento no existe un tratamiento específico para tratar la enfermedad, por lo que los cuidados se limitan a calmar la fiebre y el dolor. Tampoco existe una vacuna para la viruela del mono, aunque la vacuna antivariólica que se usó para erradicar la viruela humana otorga cierto grado de protección (que podría llegar al 85%). Sin embargo, no está disponible en nuestro país por el momento.
Por eso es fundamental la prevención: que las personas que estén cursando la enfermedad comprendan que deben permanecer aisladas, ya que las lesiones pueden ser contagiosas hasta la caída total de todas las costras y la presencia de piel nueva sana. La especialista advierte que en otros países se vieron complicaciones: neumonía, meningoencefalitis, lesiones en los ojos que pueden traer trastornos visuales. Y que la enfermedad puede ser más grave en embarazadas, en inmunocomprometidos y en la niñez. Sin embargo, nada de eso pasó todavía en Argentina.
Perfil de los contagiados con la viruela del mono
Según el Boletín Epidemiológico Nacional (BEN), el total de casos asciende a 1025, de acuerdo a los datos registrados hasta el 22 de noviembre, y el 98,14% de los casos corresponden a personas de sexo masculino (19 responden a sexo legal femenino, 4 de género trans y 15 de género cis).
Esta es la población que se reconoce por ahora como de mayor riesgo, pero eso no significa que no pueda aparecer mañana una mujer o un niño con la enfermedad, tal como ocurrió en España. Hoy la viruela del mono está focalizada en un grupo, pero no es excluyente. “Veremos con el correr del tiempo qué pasa en otras poblaciones”, indicó Yantorno.
Si bien la mortalidad es muy baja, es una enfermedad prolongada (cuatro semanas) que algunas personas cursan con mucho dolor. Por lo que amerita extremar cuidados para no contagiarse y ayudar a cortar la cadena de transmisión.