¿Quién dijo que las dietas se empiezan los lunes o que las grandes decisiones se toman el 31 de diciembre para ponerse en práctica en año nuevo?
Hoy me desperté, vi este día con sol, estuve releyendo algunos de los comentarios de ayer y decidí que esta mañana iba a ser distinta. El despertador sonó media hora antes de lo habitual y no recurrí al clásico snooze que me termina sacando de la cama a los apurones 40 minutos más tarde y sin siquiera disfrutar de esos cachitos de sueño que creo que le robo a alguien distinto a mi misma, desayuné (con frutas) y llegué a la agencia temprano y de tan buen humor que fui sacando fotos por el camino. Los palos borrachos con flores sobre 9 de julio, el cielo celestísimo, la florería de acá abajo que está llena de jazmines que amo y la cara de felicidad de la recepcionista esta mañana que nos anunció que está embarazada.
Los miércoles no tiene por qué hacerle honor a su nombre. Los miércoles pueden ser días de maravilla. Yo, hoy, le pongo onda.
Y voy a tratar de sostenerla.
¡Buen miércoles para todos!