La lista esperanzadora de potenciales "hombres clavo" no funciona.
Marcos, no contesta su celular y después de dos mails manda uno avisando que está en Europa haciendo cool-hunting para la marca de ropa para la que trabaja. Esto pasa con los más pendex, son tan impredecibles. Hoy están acá y mañana te diste vuelta y están en Berlín corriendo atrás de un par de zapatillas.
Gonzalo, después de años de defender su soltería con uñas y dientes y bajar las angustias con largos tragos de algún tinto carísimo, está saliendo con alguien. Esa alguien a la que se refiere constantemente como "mi chica" es diseñadora de ropa y tiene un negocio en Palermo Viejo. La googleo y muy a mi pesar concluyo que además de todo es una diosa. Tacho la G.
Francis. ¿Qué puedo decir de Francis? Su celular no funciona. Debe estar cancelado por falta de pago, ni hablar de su banda ancha. Imposible ubicarlo. Se me ocurre tocarle el timbre en el estudio de San Telmo aunque después pienso que probablemente tampoco tenga luz.