Se imaginaban que Nicolás no iba a aparecer ayer en la reunión?
Bueno, se imaginaban bien. Me mandó un mensaje de texto que decía "se me complicó. Va el Dr. Pirulo".
Vino su abogado (a quien yo no conocía...). Le entregó una propuesta por escrito a mi abogada y se disculpó por su cliente (cliente??? Mi marido! Nicolás? Qué es esto?) Mi abogadas recibieron la propuesta y le dijeron que la iban a analizar. Quedaron en hablar todos para concertar una nueva cita.
Yo les juro, ya lo saben, me quedé tan pero tan atónita que ni llegué a enojarme.
Les dije "miren eso, mañana hablamos". Me voy a mi casa.
Me esperaban los tres ansiosos para comer y ver una película.
Se alegraron tanto de verme, que no volví a pensar en lo miserables que pueden llegar a ser las personas. Me fui a dormir sabiendo que la equivocada no soy yo.
Y dormí en paz.
A pesar de todo.