Están los hombres a los que les gusta especialmente trabajar con mujeres (de hecho las eligen). Están esos a los que les da lo mismo un género u otro. Y después están los de esa raza a la que pertenece mi cliente de esta mañana que las considera seres inferiores pero de todas formas no pierde la oportunidad de tirarles un "lance" (como diría mi padre).
Cuando se trató de hablar de laburo y negociar números, le dedicó todas las miradas a Pedro; cuando se terminó "lo serio" se las dedicó a mis tetas. Fiaca. ¿Qué le hace suponer a un tipo que puede mirarte así en un contexto laboral (y mandarte un mail dudoso después) sin que lo consideres ofensivo? Qué poca evolución en algunos señores argentinos.
Este fin de semana planeo dedicárselo a mi balcón; ir al vivero, comprar macetas, plantitas aromnáticas, tierra y fertilizante. Si no tengo jardín, voy a tener un balconcito que justifique su pequeña existencia, ¿no? ¿Qué planes por ahí? Buen fin de semana para todos.
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