Mascotas, ¿sí o no?

Mi relación con los animales domésticos fue compleja hasta hace unos años. Soy alérgica a los gatos desde que tengo memoria (a pesar de que me encantan) y cuando era chica le tenía algo entre miedo y asco a los perros. Me da un poco de vergüenza contar esto, porque hoy en día me gustan mucho.

Cuando tenía 13 años me fui de vacaciones con una amiga, su familia y su perro. Al principio lo odiaba, pero a los diez días ya éramos amigos. Ahí creo que fue el principio de mi recuperación. Tal es así, que hace tres años insistí tanto que quería un perro que finalmente con mi familia compramos uno y lo adoro, pero se quedó con ellos en su casa.

La semana pasada antes de arrancar el blog tuve una especie de recaída. Empecé, después de más de un mes de vivir sola, a sentirme realmente sola . Me puse a pensar el por qué y, a pesar de cambiar mi actitud en relación a algunas cosas (como invitar más gente a mi casa), me di cuenta que la respuesta es, básicamente, que estoy sola. Podrá sonar obvio, podrán tildarme de dormida, pero me di cuenta que estoy por mi cuenta al 100%, a pesar de que ante cualquier problema tengo a quién llamar. Pero todas sabemos que no es lo mismo tener a alguien al lado que tener a quién llamar . Ahí fue cuando empecé a pensar la posibilidad de tener un perro, alguien que me espere todos los días, que me acompañe, que aunque sea responda con un ladrido a mis diálogos conmigo misma.

Cuando consulté la idea con mi novio y con mi familia la respuesta fue un NO rotundo y en algún punto tienen razón. Estoy fuera de mi casa todo el día y el pobre perro se moriría de la angustia encerrado en un dos ambientes solo. No tengo patio y en mi balcón entran dos personas con suerte. Además, está el tema de los costos. Tener un perro implica, en general, comprarlo y pagar veterinario y comida (al menos los primeros meses).

De todas formas sigo obsesionada con el tema y no paro de googlear fotos de perros. Les dejo algunos de mis preferidos.

Que tengan un buen fin de semana.

Este video tienen que verlo, háganlo por mí. Es de Ok Go, una banda a la que casi todos conocen por sus videos. Este lo hicieron con perros rescatados por familias adoptivas y es genial.