Transformó el negocio familiar y vende 10 millones de cafés al año

Claudia Salas Martínez estudió psicología y arquitectura y aunque no siguió ninguna de esas carreras asegura que encontró en esa formación las herramientas que utiliza día a día en su trabajo como socia directora de Café Martínez. La disposición, decoración y estética de los locales son, justamente, una de las características de la cadena y Claudia se esmeró en mantenerla a lo largo de los años. "Busco siempre generar espacios cálidos y acogedores para que la gente se sienta bienvenida, para disfrutar un excelente café y ser agasajada como invitada de lujo", destaca.

Para Claudia el café es la historia de su familia y por lo tanto de una pasión "Con mi abuela aprendí a moler y embolsar nuestro café en el mostrador, aunque nunca pude igualarla", evoca. "Hacía cafés perfectos y cortaba el hilo de algodón sin tijera", describe. También su abuelo le enseñaba a seleccionar y a clasificar los granos por sus defectos en su gran escritorio del local de la calle Talcahuano 948 donde aún hoy está la tostadora de café original.

Al aceptar el desafío de sumarse a la empresa familiar, hizo cursos de gastronomía para desarrollar los menúes y luego instaló una fábrica de tortas propias para la marca. Otra de sus decisiones gerenciales fue armar un equipo propio especializado en tostación y cata de café para abastecer y capacitar a las franquicias.

Tanto se especializó en el rubro que actualmente forma parte del jurado del Campeonato Internacional de Baristas de Café Martínez y lidera junto al equipo de Recursos Humanos y Marketing distintos proyectos para impulsar a las mujeres a animarse a emprender sus propias franquicias, alineando así los valores de la empresa al desarrollo de la igualdad de género.

El potencial del café es infinito y permite innovar en productos y servicios, capacitar a los equipos y llegar cada vez a más lugares del país y del mundo con mejores experiencias para los amantes de la bebida.

Los hermanos trabajaron en equipo para seguir creciendo: cada uno asumió un rol, ya fuera encargándose de lo que sabía hacer o aprendiendo lo necesario para transformar la marca en una franquicia o para generar una imagen identificable.

¿ Consejos para emprender? Claudia tiene uno: "Las claves para todo es tener empuje, decisión, creatividad, saber trabajar en equipo y plasticidad, sobre todo en nuestro país que es un país joven, cambiante, y hay que saber estar atentos para generar las adaptaciones necesarias", concluye.