Los 4 pasos para mantener el foco en tus metas y dominar tus miedos saboteadores

Infundados y paralizantes: los miedos saboteadores son irracionales y paralizantes. Te roban tus recursos, dejándote sin la capacidad de actuar. En lugar de dedicar tiempo a prepararte adecuadamente para tus desafíos, te dejan atrapado en una espiral de preocupación y ansiedad.

Consumidores de tiempo: estos miedos son expertos en consumir tu tiempo. Te pasas horas y horas absorto en estas películas mentales que tu mente fabrica, y eso te deja sin energía, ni perspectiva, ni motivación para avanzar hacia tus objetivos.

Identifica la fuente del miedo: ¿Tu miedo está basado en hechos reales o es simplemente una creación de tu mente? A menudo, descubrir que nuestros miedos carecen de fundamentos sólidos puede ser el primer paso para liberarnos de su control.

Cambiá tu diálogo interno: desafía esa voz interior negativa que te dice que todo va a salir mal. En lugar de eso, cambiala por una voz que te motive y te recuerde que sos capaz de superar cualquier desafío que se te presente.  Agradecele a tu miedo sus intenciones de cuidarte, pero usá tus recursos concertos y no películas paralizantes.

Desarrolla un plan de acción: una vez que hayas identificado tu miedo y cambiado tu diálogo interno, pensá un plan efectivo para enfrentar tus desafíos. Definí paso a paso lo que necesitas hacer para lograr tus metas y asegurate de incluir medidas concretas para superar cualquier obstáculo que pueda surgir.

Pasá a la acción - poné en marcha tu plan: finalmente, llegó el momento de actuar. Basándote en tu plan y en la creencia de que todo va a salir bien, da el primer paso hacia tus metas. Recuerdá que el verdadero éxito no se es evitar el miedo, sino en enfrentarlo y superarlo con un plan flexible y sabiendo que tenés los recursos para pivotar las veces que sea necesario.