Edging: la técnica para tener orgasmos más intensos
De qué se trata el edging y cómo ponerlo en práctica en pareja o en solitario. Te detallamos algunos consejos expertos.
18 de abril de 2024
Con esta técnica se ven involucrados aspectos psicológicos y físicos. - Créditos: Getty Images
Sentir placer por más tiempo estando solos o acompañados ¿quién podría negarse? Existe una técnica denominada edging que consiste justamente en eso, ya que retrasa el orgasmo a través de diferentes métodos, lo que hace que el placer se expanda y potencie.
Se trata de una técnica que combina aspectos físicos y psicológicos para conseguir eyaculaciones y orgasmos más intensos a través del ida y vuelta, en la intensidad del acto erótico.
Según cuenta la terapeuta sexual Uchenna Ossai a Redbookmag esta técnica permite alcanzar “el mayor placer posible de un orgasmo. Es la madre de todos los orgasmos".
El objetivo es retrasar el clímax el tiempo suficiente para que el deseo se eleve a tal punto que la persona que lo está experimentando “sienta que va a estallar", dice. Y lo detalla: “El edging es cuando vos o tu pareja se acercan al orgasmo, pero retrocedan justo antes de llegar al punto cúlmine y luego recuperan la energía sexual para acercarse nuevamente. Es una de las muchas maneras de mejorar el orgasmo y la experiencia del tiempo sexual de una persona”.
Una técnica que nos hace ir y venir en el grado de excitación
De acuerdo a la mirada experta, esta técnica apunta al control del orgasmo para mantener un un alto nivel de excitación sexual durante un período prolongado de tiempo sin llegar al éxtasis. "Es ir hacia atrás cuando parece que vas a llegar al orgasmo y después volver a aproximarte", explica la terapeuta.
"Aunque baje la erección y te centres más en complacer a tu pareja no te preocupes, casi siempre viene otro detrás y el orgasmo será mucho más potente. No solo aumentará la cantidad de semen, sino que también lo harán las contracciones que se dan con la liberación y producen un océano de placer", argumenta.
Retrasar el orgasmo para que se vuelva más intenso y duradero. - Créditos: Getty Images
Involucra el aspecto psicológico y físico
"No solo es algo psicológico, sino también físico. Hay un aumento en el flujo de la sangre hacia el área pélvica cuando se detiene el orgasmo y se continúa la estimulación".
En este sentido, asegura que los edgings crean una erección más fuerte tanto para hombres como para mujeres. "Las mujeres también tienen erecciones del clítoris, por lo tanto, esta técnica funciona tanto en ellos como en ellas. Combinar movimientos lentos y rápidos, circulares (o con un juguete sexual de diferentes velocidades) es la clave", finaliza Ossai.
Con el edging se busca alcanzar el mayor grado de excitación sexual posible. - Créditos: Getty Images
Consejos para practicar edging
Lo primero y más básico (pero que no siempre sucede) es comunicarte con tu pareja (si lo realizas en conjunto) para que no se sorprenda si se extiende el acto.
En lo posible, estimular a tu pareja y vos al mismo tiempo durante el sexo, al punto de quedar cerca del orgasmo, pero evitarlo. ¿Cómo? Es cuando es vital reducir el nivel de excitación variando la intensidad y con elementos de distracción.
La reducción del ritmo debe ser cuidadosa y gradual: No extenderse por mucho tiempo para no romper el clima. Lo importante es alejarse un poco del orgasmo.
Transcurrido el tiempo necesario (eso depende de cada persona) se recomienda volver a estimular y repetir la acción dos o tres veces, siempre teniendo cuidado de no cortar totalmente el clima. Cuando se sientan listos (o que no aguantan más) entonces sí dar espacio para liberar el orgasmo que, se espera sea bien intenso gracias a la liberación de mayor tensión y excitación acumuladas.
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