Qué es el “triángulo mágico”, el truco deco que sirve para agrandar espacios de pocos metros

Así nació el triángulo de aluminio cepillado que es el corazón de este departamento futurista. Imaginate tener la cocina, el baño y el espacio de almacenamiento metidos en una estructura central. ¡Es como tener tu propio transformer doméstico! Además, tal como apunta Quinteros, “cada ambiente termina delimitado por un ángulo recto y una diagonal que quiebra con la perspectiva tradicional de los departamentos, algo que enriquece mucho la espacialidad interior”.

Pero la cuestión no termina ahí. Alrededor de este triángulo mágico, Pitarch creó tres zonas bien diferenciadas: una para vivir el día a día, otra para cocinar y limpiar y una tercera para trabajar o recibir visitas. Lo copado es que usó materiales diferentes en el piso para marcar cada espacio sin necesidad de paredes. Madera para ponerte cómoda, terrazo para la acción. “La decisión de dividir los ambientes con un cambio de materialidad en el piso en lugar de separar con paredes logra sectorizar los espacios sin un bloqueo espacial y favorece también la apertura visual”, señala Quinteros.

En este sentido, Maga Muchnik, interiorista, agrega que “resulta positivo y funcional eliminar las paredes y utilizar materiales nuevos en distintos sectores para generar espacios de guardado. La idea es lograr que los materiales no queden pesados y que se mimeticen con el ambiente”.

Por otra parte, como si fuera poco, Pitarch agregó una isla circular en la cocina que también hace que el lugar parezca más grande. Es como tener tu propia nave espacial en medio del living.

Lo más interesante de todo es cómo cambia la percepción del espacio. Donde antes veías un departamentito apretado, ahora tenés un lugar que respira, que se adapta a tu vida. Pitarch lo describe como "abstracto y a-estilístico", que es una manera fancy de decir que rompió con todo lo que se venía haciendo. “Al resolver dentro del ángulo agudo el espacio de guardado se obtiene como resultado un ángulo obtuso que favorece la sensación de amplitud del espacio”, indica Quinteros.

Esta idea es un golazo para todas las que vivimos en la ciudad y queremos sacarle jugo a cada centímetro de nuestro hogar. Nos muestra que con un poco de creatividad podemos transformar hasta el espacio más pequeño en un lugar donde dan ganas de vivir.

Así que ya sabés, la próxima vez que entres a tu departamento y te sientas claustrofóbica, acordate del triángulo mágico. Quizás no necesites mudarte, sino pensar fuera de la caja... ¡o dentro del triángulo!