Vacaciones de invierno: de esquí, a playa, selva o sierras, las mejores opciones para disfrutar

La ciudad de Salta es el point perfecto para empezar el recorrido por la provincia. Sus callecitas empedradas, para recorrer a pie, resultan un viaje al pasado con las fachadas coloniales, el Cabildo, la Catedral, la Iglesia San Francisco y las plazas. La calle Caseros es una de las más transitadas por los turistas, con sus locales comerciales con variedad de artesanías y los cerros de fondo. Por otro lado, el Tren a las Nubes es uno de los mayores atractivos turísticos de la provincia. El pasaje incluye el traslado en bus desde la capital hasta San Antonio de los Cobres, desde donde sale. 

Luego, Cafayate es un buen plan, especialmente si querés visitar alguna bodega. Podés ir y venir en el día o quedarte a pasar la noche en alguna hostería. En el trayecto visitás lugares increíbles como la Quebrada de las Conchas, la Garganta del Diablo, el Anfiteatro o el Mirador Tres Cruces. Por otro lado, Cachi es un destino obligado para quienes quieren sumergirse en los paisajes agrestes del NOA, donde vas a poder recorrer el Parque Nacional Los Cardones. 

Cómo llegar: En auto, son 1500 km desde Buenos Aires. En avión, se llega por Aerolíneas Argentinas, JetSmart y Flybondi.

Dónde dormir: El hotel Ayres de Salta (@ayresdesaltaok), en el centro de la ciudad y con certificación de sustentabilidad, tiene habitaciones con desayuno bufet desde $112.000 la doble.
 
Dónde comer rico: En el cerro San Bernardo está El Baqueano (@el.baqueano), con una vista panorámica de la ciudad. El chef Fernando Rivarola invita a disfrutar de la alta cocina con foco en los productos autóctonos.

Seguir la ruta natural por la selva misionera es descubrir el verdadero trópico argentino. Con sus incontables reservas naturales y caminos de tierra colorada, vas a hacer turismo aventura, observar aves y descansar rodeada de un verde vibrante. Te recomendamos arrancar por la joya de la provincia: el Parque Nacional Iguazú, con sus icónicas cataratas. 

Muy cerca, están el salto Yasy y las penínsulas de Andresito, con actividades de navegación en kayak. Al sur, se llega al Parque Provincial Urugua-í, donde se encuentra el animal más grande de la selva misionera: el tapir; y el Corredor Biológico Urugua-í Foerster, con su gran puente de selva sobre la ruta, donde los animales van y vienen. En cada uno de estos puntos se puede hacer senderismo, paseos en bicicleta, avistaje de aves y fauna. 

Camino a los Saltos del Moconá, uno de los puntos más destacados de la Ruta Natural y donde te sugerimos pasar un par de noches, está la Reserva de Biosfera Yabotí. Allí se puede hacer base y visitar los saltos que se forman sobre el río Uruguay.

Cómo llegar: En auto hasta Puerto Iguazú son 1275 km. 
En avión, hasta Posadas o Puerto Iguazú, por Aerolíneas Argentinas o Flybondi. 

Dónde dormir: El nuevo Pristine Iguazú Luxury Camp (@pristinecamps) es la opción de lujo para alojarse en la inmensidad de la selva. Desde $400.000 la doble. En el corazón de la Biosfera Yabotí está el Moconá Virgen Lodge (@moconavirginlodge), en pleno contacto con la naturaleza, desde $300.000 la doble. Y si vas con chicos, a tan solo 15 minutos del parque nacional Iguazú, inmerso en dentro de 8 hectáreas de hermosos jardines, Iguazú Grand (@iguazugrand), es un resort de 5 estrellas que tiene un Club de la Selva para ellos, con talleres creativos, actividades teatrales, para aprender sobre la cultura y el entorno natural guaraní, con una serie de actividades recreativas, lúdicas, educativas y al aire libre. 

Dónde comer rico: En Moconá, el Yabotí Restó pone en valor la cocina local. 

Imperdible
La ruta de la yerba mate y la ruta del té con visita a las plantaciones y los establecimientos donde se desarrollan los distintos procesos productivos de estas infusiones.

Bosques, refugios, lagos. Y en invierno, la montaña nevada es protagonista. Los amantes del esquí de descenso y el snowboard eligen Cerro Catedral, con sus múltiples pistas. Un pase de adulto para 5 días de la temporada 2024/2025 –consecutivos o alternados– cuesta unos $575.000 (para los menores, $480.000). Pero Bariloche tiene otras opciones para disfrutar de la nieve. En la ladera del cerro Otto se encuentra el Centro de Esquí Nórdico, con esquí de fondo; es una técnica similar a caminar con tablas. Además, hay recorridos con cuatriciclos, paseos en Defender y en motos de nieve. 

Ya en la cima del cerro Otto, el teleférico y su emblemática confitería giratoria te invitan a vivir una experiencia gastronómica de 360 grados. En la ladera sur del Otto, está el Refugio de Arelauquen, un restaurante de montaña con vistas al lago Gutiérrez al que solo se llega en moto de nieve o camioneta 4x4. Por otro lado, en el cerro López está el refugio Extremo Encantado, que ofrece caminatas con raquetas, pista de trineos y fondue (de queso o de chocolate, según el turno). ¡Imperdible!

Cómo llegar: Hay vuelos diarios con JetSmart, Flybondi y Aerolíneas. En auto, son 1600 km desde Buenos Aires.

Dónde dormir: La avenida Bustillo implica fácil acceso a la ciudad y a los centros invernales e increíbles vistas panorámicas. Le Château (@lechateaubariloche) tiene habitaciones desde $110.000 la doble.

Dónde comer rico: Para cenas especiales, Anima (@animarestaurante), con menú degustación. Quetro (@quetrococina) es un restaurante a puertas cerradas con menú por pasos inspirado en los productos del Sur. 

Imperdible

El Complejo Piedras Blancas ofrece actividades divertidas para disfrutar de la nieve: trineos, zipline, snow tubing y snow safari.

El invierno en la cordillera despierta las ganas de sumergirse en la aventura de los deportes de nieve con la mística del paisaje de montaña. A 19 km de San Martín de los Andes se encuentra el centro invernal de Chapelco, que propone excelentes alternativas para disfrutar de la nieve con imponentes vistas panorámicas del lago Lacar y del volcán Lanín. 

Chapelco ofrece una variedad de pistas de diversas dificultades con excelente calidad de nieve rodeadas de lengas. Están abiertas a todo el público y no es necesario hacer esquí o snowboard, solo hay que adquirir el pase Telecabina. Además de los clásicos deportes de nieve, se ofrecen experiencias como los paseos en trineo con perros huskies y siberianos, caminatas con raquetas de nieve y paseos en moto de nieve. Si te gusta la adrenalina, podés realizar un vuelo en parapente junto con instructores especializados. En la base, podés visitar el domo The Hunter para realizar realidad virtual inmersiva, con más de 90 juegos y experiencias. ¿Cuánto cuesta el pase diario esta temporada? Para los adultos, $68.300, y $54.600 para los menores. Los vuelos se realizan desde la cumbre o desde El Balcón, para descender en un vuelo con las vistas más lindas de la cordillera. 

Cómo llegar: Aerolíneas Argentinas y JetSmart tienen vuelos diarios a San Martín de los Andes. En auto, son 1500 km desde Buenos Aires.

Dónde dormir: Miradores del Lanín (@miradoresdellanin), en la zona de Las Pendientes. Dormi hasta 4 personas, desde US$2500 + IVA x 7 noches. 

Dónde comer rico: En Lo de Cacho (@lodecachotrattoria) las pastas son las protagonistas. 
Para merendar, Arrayan (@arrayan_sma), una casa de té en la montaña con una increíble vista panorámica de la ciudad.

Imperdible

Si te gusta la adrenalina, podés realizar un vuelo en parapente junto con instructores especializados. Los vuelos se realizan desde la cumbre o desde El Balcón, para descender en un vuelo con las vistas más lindas de la cordillera.

Dueña de paisajes majestuosos, noches largas y atardeceres mágicos, con múltiples posibilidades en temporada invernal. A los clásicos paseos embarcados por el canal Beagle y las caminatas por el centro histórico, se les suman las actividades en Cerro Castor, con pistas de esquí y snowboard y una pista de patinaje en la base. El pase diario esta temporada cuesta $58.200 (adultos). 

A solo 12 kilómetros de la ciudad se encuentra el Parque Nacional Tierra del Fuego, una reserva natural con increíbles vistas hacia bosques, lagos, ríos y montañas. Ahí podés hacer la excursión de cuento del Tren del Fin del Mundo. Otro buen plan es visitar los lagos Escondido y Fagnano en minibús o en modernos vehículos 4x4. Si no querés alejarte mucho, está el Centro Glaciar Martial, con confitería, aerosillas y pistas para esquiar, hacer snowboard y pasear en trineo. 

¿Un imperdible? Pasar un día de spa en el Hotel Arakur (@arakur_ushuaia), con las maravillosas vistas del canal Beagle y la ciudad. Si te animás a la pileta externa, es un sueño.

Cómo llegar: En avión, por Aerolíneas Argentinas, Flybondi o JetSmart. 

Dónde dormir: Hotel Las Lengas (@laslengashotelushuaia) está a unos minutos de la ciudad, rodeado de naturaleza y con vistas al canal Beagle. Desde $95.000 la doble.

Dónde comer rico: Kalma (@kalmaresto) es el restaurante de Jorge Monopoli, y el punto obligado para probar cocina autóctona de alto nivel. Otra opción es Kaupe (@kaupe_restaurante), atendido por sus dueños. Para algo más informal, Sucucho y su comida callejera.

Córdoba convoca por sus paisajes armoniosos, el aire de las sierras, el sonido de los arroyos y la tranquilidad de sus pueblos. Y Traslasierra es un buen lugar para vacacionar. 

Uno de los mejores planes son las caminatas (¡bien abrigada!). Nono tiene varios senderos autoguiados para recorrer según el grado de dificultad. Los lugareños recomiendan El Empedrado (5 km), por sus increíbles vistas panorámicas y su historia. También vale la pena visitar el Museo Rocsen, que alberga más de 22.000 piezas vinculadas con las ciencias, arte y tecnología. Si te animás a más, podés ascender con una excursión al cerro Champaquí. 

En San Javier y Yacanto hay varios planes, entre ellos, visitar la bodega Aráoz de Lamadrid y Granja Verbena, donde se elaboran quesos de cabra. Villa Cura Brochero, Mina Clavero, Las Rabonas, Villa Las Rosas con su feria de artesanías, también merecen un recorrido. 

No te pierdas Las Tapias, un dique escondido con un espejo de agua grande y calmo. Se puede emprender caminatas y en el parador Tila Helen te alquilan kayaks para navegar.

Cómo llegar: En auto, son unos 880 km desde CABA por Ruta 9. 

Dónde dormir: San Javier es la zona ideal para hacer base. En esta localidad se encuentra La Matilde (@posadalamatilde), una posada rural de 10 habitaciones. Desde $250.000 la doble.

Dónde comer rico: Sobre la Ruta 14 está Peperina (@peperinarestaurante), que funciona en una vieja casona de 1870, con el gran cocinero Alejandro “Nitu” Digilio. En San Javier, La Juana y Vos (@lajuanayvos), un restó con comidas simples y sabrosas camino al Champaquí. 

Es el paraíso termal de Argentina. Más de 15 centros termales distribuidos por toda la provincia ofrecen sus instalaciones para quienes buscan renovación y bienestar. Las más cercanas a CABA son las de Gualeguaychú, con piscinas termales pasivas (para adultos) y una piscina activa pensada para los más chicos.

En el complejo hay spa y la posibilidad de alojarse en bungalós dentro del predio. Las de Villa Elisa son unas de las más pintorescas; con 10 piscinas de diferentes temperaturas y usos, además de un lujoso spa y un hotel 4 estrellas. Los más chicos se divierten en la piscina con olas. El Parque Termal de Federación es uno de los más concurridos y un tradicional, fue el primer pozo termal de la Mesopotamia.

Las de Colón y San José están muy cerquita y ambas resultan un plan ideal para quienes buscan combinar ciudad con paseos rurales. También hay termas en Pueblo Belgrano, Basavilbaso, Chajarí, Concordia, La Paz, Concepción del Uruguay, María Grande y Villaguay. No te vayas sin visitar Liebig, un pueblo tranquilo y bucólico que parece suspendido en el tiempo. 

Cómo llegar: En auto, por la RN 9 y luego la RN 12 se llega a Gualeguaychú. Son 230 km desde CABA. Si vas al centro termal más lejano, unos 493 km hasta llegar a Chajarí.

Dónde dormir: En Villa Elisa está Quinto Elemento (www.hotelquintoelemento.com.ar); desde $150.000 la doble. En Colón, Cabañas El Origen (@cabanaselorigen), desde $78.000.   

Dónde comer rico: Noha Restaurante (@nohacasadecampo), en Colón, tiene deliciosas preparaciones que van rotando cada semana. Una experiencia distinta, exclusiva para parejas.

En verano o en invierno, Chascomús siempre es un buen plan. Ya sea para una escapada en el día o para quedarse durante un finde largo o las vacaciones y bajar un cambio. 

Caminar por las callecitas adoquinadas es una experiencia única, en una ciudad con riqueza histórica (el Palacio Municipal, la Iglesia Catedral, la casa del expresidente Raúl Alfonsín, la Casa de Casco, la Capilla de los Negros, entre otros atractivos). También los paseos en auto, a pie o en bicicleta alrededor de la laguna. 

En el balneario San José hay botes a pedal para disfrutar de un momento de relax en medio del agua. Parques como el Los Libres del Sur invitan a una mateada. En Casa Balto vas a encontrar propuestas de diseño de artistas y emprendedores locales. La Vizcachera es el lugar para comprar productos regionales. 

No dejes de hacer una visita a la Pulpería Gándara; esta cafetería llegó para revivir el paraje olvidado de Gándara. Abre los fines de semana. Y en los alrededores se puede visitar el viejo monasterio, la estación de tren y la vieja fábrica de lácteos.  

Cómo llegar: En auto, por RN 2, 126 kilómetros desde CABA. Otra opción es ir en tren, que parte de Plaza Constitución. 

Dónde dormir: En el corazón del centro histórico se encuentra La Botica de 1852 (@laboticade1852hotel), un hotel boutique atendido por sus dueños. Desde $40.000 la habitación doble. Para una estadía rural, está Refugio El Vergel (@refugioelvergel), desde $65.000 para dos.

Dónde comer rico: Chancho Aurelio (@chanchoaurelio), con preparaciones de rotisería simples pero con una vuelta de rosca. 

Cariló tiene muchos lugares para visitar en un destino cercano, con el mix de poder recargar energías con la vista y el sonido del mar -aunque quizás no te puedas meter al agua-, pero tiene el plus del bosque y de muchas atracciones y excursiones para disfrutar de la ciudad. ¿Un planazo para los chicos? Ir al Eco Parque Kalo, con tirolesas, puentes aéreos, palestra y actividad de arco y flecha. 

Cómo llegar: En auto, desde Buenos Aires, son apenas unos 362 kilómetros, unas 4 horas aproximadas.

Dónde dormir: la cadena de hoteles Howard Jonhson (@howard_johnson_carilo) tiene una promoción -también en sus 40 sucursales de todo el país- de 3 noches, que incluyen no solo el alojamiento en base doble con desayuno buffet, sino también almuerzo o cena para 2 personas (principal y postre sin bebidas), acceso a gimnasio, sauna y piscina outdoor y actividades recreativas. ¿Otro datazo? Su family plan incluye hasta 2 menores de 12 años sin cargo adicional en alojamiento, compartiendo habitación con mobiliario existente. Más info: www.hojoar.com.

Tirarse a la arena y respirar el ambiente brasileño en alguna playita carioca es el deseo de muchas para escaparse del frío y meterse en el mar. Ipanema, Leblon y Copacabana son las playas más convocantes, aunque vale la pena pasar por Praia Vermelha y tomarse una foto con el Pan de Azúcar de fondo. Si querés ver un atardecer perfecto, apostate en la piedra de Arpoador, con la playa de Ipanema y Leblon como protagonistas de la escena. 

Pero además de las playas, Río cuenta con una infinidad de atractivos para no aburrirse. Desde el Museo del Mañana con sus obras interactivas hasta el Jardín Botánico y el Parque Lage con su mansión y su exuberante entorno verde. Para ver la Río bohemia, te proponemos un recorrido por las callecitas del barrio Santa Teresa. Al anochecer, los barcitos del barrio Lapa ¡activan a pura samba!

Imperdible: hacer un tour a Arraial do Cabo, unas de las playas más paradisíacas de todo Brasil. Se llega en bus hasta Arraial y luego paseo en catamarán y desembarco en las playas. 

Cómo llegar: Unas 3 horas en avión desde Buenos Aires, desde $250.000 por JetSmart.  

Dónde dormir: El Arena Ipanema Hotel (@arenahoteis) está a solo 100 metros de la playa Ipanema y cerquita de Copacabana. Es el lugar perfecto para moverse caminando a ambas playas. Ofrece suites y piscina en la terraza con vistas panorámicas al mar. Desde US$110 la doble.

Dónde comer rico: Chanchada (@chanchadabar) es el spot perfecto para probar ricos platitos en un ambiente canchero.

Ya lo sabemos: sus playas de arena blanca y mar turquesa cautivan al mundo entero. Y los argentinos nos sentimos muy a gusto con Cuba, especialmente por la hospitalidad de su gente y por su historia. Las playas más lindas están en los cayos, donde se han construido confortables resorts que ofrecen servicio completo al viajero para que no tenga que moverse del lugar. Cayo Largo, Cayo Guillermo, Cayo Coco, Santa María, Ensenachos, a todos los une la misma misión: recibir a los viajeros y que puedan relajarse al sol con los pies en la arena o en el agua. 

En cada lugar se ofrecen diferentes tours para quienes deseen hacer algo diferente en la isla. Desde actividades como buceo o snorkel para conocer el impresionante mundo submarino tropical hasta recorridos por ciudades de riqueza histórica como el tridente conformado por Trinidad, Santa Clara y Cienfuegos. Y dejate unos días para recorrer La Habana: visitar a pie el centro histórico, dar un paseo en un auto sesentoso, visitar la Plaza de la Revolución, donde está el icónico rostro del “Che” Guevara.

Cómo llegar: En avión hasta La Habana por Lan o Copa Airlines; y luego unas 5 horas de bus hasta Cayo Santa María.

Dónde dormir: El Melia Las Dunas es un all inclusive con piscinas, restaurantes, deportes acuáticos y spa. Desde US$100 la noche en base doble (all inclusive). El Iberostar Ensenachos tiene acceso a las playas más exclusivas del cayo. Desde US$120 la doble all inclusive.

Dónde comer rico: En La Habana se come muy rico y a buen precio: Ricardón, Los Nardos y El Chanchullero son nuestros restós favoritos.