Conocé la exótica flor del amor que es tendencia en decoración de interiores y purifica el aire

La catalogación de la planta Anturio es bastante reciente. Al parecer, el botánico Edouard André descubrió la flor en las selvas colombianas en 1876, durante una expedición financiada por el gobierno francés, según indica el sitio oficial de Jardinería de la Asociación Española de Centros de Jardinería. Un dato: André fue un paisajista célebre y participó en el ajardinamiento del París decimonónico.

Al anturio también se le atribuyeron poderes afrodisíacos principalmente por algo que está bien a la vista, la anatomía de la flor: gracias a una hoja modificada en forma de corazón, y a la flor propiamente dicha ubicada en el centro conocida como espádice (y también como candela en América) que está asociaba con el órgano sexual masculino.

En algunas culturas antiguas, se supo con el tiempo, que esta flor era ofrecida como símbolo de fertilidad a las jóvenes que deseaban quedar embarazadas.

La importancia de la luz: hay que señalar que los anturios necesitan recibir suficiente luz indirecta para florecer de forma ininterrumpida. Cuanta menos iluminación tenga, más pequeñas serán las hojas rojas; sin embargo, si recibe los rayos del sol se pueden quemar sus hojas, de ahí que no se encuentre entre las plantas más resistentes al sol. Además de una buena ubicación, el anthurium necesita una temperatura entre 16ºC y 21ºC.

Riego: esta planta necesita mucha humedad, pero sin que las hojas se vuelvan amarillas, eso podría ser signo de exceso de agua o de haber quedado encharcada luego de haber recibido agua. Entonces, para mantenerla siempre húmeda y en buen estado, lo más adecuado es un riego ligero y regular; en verano se puede regar todos los días. A su vez, es una buena alternativa pulverizar las hojas en cada ocasión de riego para aportar humedad y bienestar a la planta.

Abono: Es importante proporcionar a la planta un fertilizante líquido específico para este tipo de plantas, se consigue en la gran mayoría de vivieros. Cuando lo tengas, previa consulta con un experto, deberías de pensar en aplicarlo cada dos semanas en primavera y en verano.

En el año 1989, la NASA realizó el estudio titulado Clear Air Study para determinar cuáles eran las plantas capaces de limpiar el aire en las estaciones espaciales. De esa investigación surge el dato de que la flor Anturio cuenta con un gran potencial para limpiar el oxígeno y renovar la energía del espacio donde ella se encuentre ubicada.

Cómo logran limpiar el aire: las enormes hojas del anturio absorben sustancias tóxicas e inflamables como es el amoníaco, el xileno o el tolueno, muy presentes en impresoras y elementos de oficina (entre muchos otros sitios donde también aparecen), y al mismo tiempo, demostraron ser excelentes para eliminar gas formaldehído, el cual suele estar presente en alfombras o tapizados de cuero.