Los mejores libros de poesía escritos por mujeres en 2025: cinco títulos imperdibles (y un bonus track)

La publicación de Poesía completa, de Silvina Ocampo en un solo volumen no es solo un acontecimiento editorial: es la oportunidad de acceder, por primera vez de manera íntegra, al costado menos transitado de una autora clave de la literatura argentina del siglo XX.

La poesía de Ocampo se despliega como un territorio singular, donde lo cotidiano se combina con hallazgos expresivos que sorprenden por su precisión, su ternura irónica y su mirada casi secreta sobre animales, plantas, amores e infancias. En sus versos conviven la miniatura narrativa, la disciplina del ritmo, el recuerdo autobiográfico y una sensibilidad afinada que la vuelve única dentro del canon.

Este tomo reúne sus libros publicados entre 1942 y 1984, traducciones para la revista Sur, poemas dispersos seleccionados en 2001 e inéditos aparecidos en revistas. El resultado es un mapa completo de una obra que, lejos de ser marginal, revela a una poeta consciente de su gesto y capaz de renovar la lengua desde adentro. Una recuperación imprescindible para entender la literatura argentina en toda su amplitud.

Única sabiduría, de Silvina Ocampo

Lo único que sabemos
es lo que nos sorprende:
que todo pasa, como
si no hubiera pasado.

Selección de Ariel Schettini y Liliana Viola para Editorial de Autora (distribuye arta ediciones).

Aurora Venturini es conocida por su obra narrativa —sobre todo desde Las primas—, pero este libro devuelve al centro de la escena su dimensión poética, aquella que comenzó en los años cuarenta y que funcionó como matriz de todo su universo literario.

El prólogo de Ariel Schettini reconstruye ese origen: una joven Venturini ejercitándose en métricas clásicas, rimas y un registro sentimental delimitado para las escritoras de su época. Su formación universitaria, su dominio del francés y su contacto con Rimbaud, la poesía simbolista y el existencialismo la llevaron a expandir y tensionar esas formas. El resultado es una obra que oscila entre sonetos rigurosos y exploraciones de verso libre, entre lo medieval y lo esotérico, entre la devoción y la sombra.

El libro muestra cómo la poesía fue para Venturini un espacio de resistencia y libertad emocional, especialmente para una mujer que escribía desde márgenes literarios y personales. Su interés por la locura, la infancia y las voces desbordadas encuentra aquí su expresión más concentrada. Esta selección funciona como una puerta de entrada reveladora a la Venturini menos conocida, pero profundamente fundamental.

Poema inicial, de Aurora Venturini

Con este cielo diáfano, parece 
que el corazón se hubiera levantado 
desde el húmedo lecho del otoño 
hasta la cabellera de algún árbol.

Un quieto ruiseñor amanecido, 
abrió las alas y partió su canto 
y compartió una flor, con una abeja, 
debajo de la copa del espacio.

Yo siento que en mi pecho 
ahora, el corazón acobardado, 
quiere huir a la hierba, entre las lilas, 
con una leve ondulación de pájaro.

Como un muchacho triste, 
corazón de recuadro. 
Corazón escolar 
que alguien, muy terco, dibujó en un árbol.

En “Antología personal” 

Diana Bellessi, una de las voces mayores de la poesía argentina, vuelve en 2025 con un libro donde la naturaleza, los animales y el paso del tiempo se convierten en materia vibrante del poema.

La curva del tiempo reúne escenas donde conviven antílopes y búfalos, pavas del monte, perros, árboles tutelares y diminutos seres del Delta. Bellessi logra condensar lo vasto y lo mínimo en un tono que es tierno, melancólico y sabio a la vez. Su poesía —esa que “no sirve para nada”, como dice con humor— se vuelve un refugio ante una época marcada por la urgencia y la devastación.

El poema se convierte así en un arca que preserva lo viviente, una forma de gratitud y resistencia frente a la “angurria capital”. Su voz, luminosa y profundamente humana, reafirma a Bellessi como una autora indispensable capaz de seguir renovándose sin perder la calidez y la intensidad que la caracterizan.

Fragmento de Con la bordona oscura que abandona el invierno, de Diana Bellessi

Con la bordona oscura que 
abandona el invierno, vida en sucesión
te adoro!
y fracaso en nombrarte porque nunca entra
todo lo viviente en el poema aunque insista

Recientemente distinguida con el Premio Nacional de Poesía(*), Alicia Genovese vuelve a situarse en el centro de la conversación con un libro que combina ensayo, diario de escritura y pensamiento poético.

En Poesía y errancia, la autora explora la escritura como un desplazamiento permanente, un dejarse llevar por la intuición, por la aparición del poema y por lo imprevisto. La poeta se concibe como una errante: alguien que busca, improvisa, respira, habita y se desplaza para encontrar un sentido posible.

El libro dialoga con otras trayectorias —como las de Olga Orozco, Viel Temperley o Zelarayán— y propone una reflexión sobre la escritura que trasciende lo teórico y se vuelve experiencia. Genovese describe la errancia como una práctica comparable a la improvisación del jazz: un ejercicio de libertad, audacia y sensibilidad.

Esta obra se convierte así en un faro teórico y emocional para entender de qué manera se construye un poema y cómo la escritura puede ser, a la vez, un modo de vida y un modo de leer el mundo.

23/12/2007

Ha muerto mi hermano
mi amor de nena
mi primer beso
con él mi lágrima
mi garganta anudada
las leyes terrenales ya no lo tocan

(Genovese, publicado en el capítulo La contingencia. Primera anotación de un poema extenso en memoria de su hermano titulado "Tristias")

(*) También es de destacar que le dieron este premio a la escritora cordobesa María Teresa Andruetto (escritora y directora de la coleccion narradoras argentinas de la editorial Eduvin)

Circe Maia es una poeta que escribe desde la claridad que ilumina lo cotidiano. En Un río secreto, su poesía reunida llega para confirmar que, incluso en lo mínimo, hay una música que habla de la vida.

Sus poemas se detienen en sombras, colores, movimientos casi imperceptibles, dudas de la luz o modulaciones de la voz. Con un oído poético absoluto, Circe logra nombrar incluso aquello que parece inasible. En su escritura no vemos palabras: vemos la vida vibrando.

La lectura de este volumen es una invitación a mirar de nuevo, a abrir la percepción y a recuperar la delicadeza como forma de resistencia. Maia compone una poética donde la existencia cotidiana —un amanecer, una piedra, una respiración— se vuelve revelación. Una obra para leer y volver siempre.

Amanece, de Circe Maia

Hay una hora blanca... no,
más bien descolorida. Nada tiene
todavía perfiles definidos: 
la luz no se decide
a acentuar las aristas y relieves.

Y parece que todo todavía es posible:
que una hoja sea un pájaro,
una piedra redonda, una moneda,
que el que viene allá abajo, por la esquina
sea alguien que no es, que no podría
jamás ser... Pero la luz ambigua
le da un "aire"...

Aunque no se trata de un libro escrito exclusivamente por mujeres, esta antología —o más bien, esta selección, como remarca Luis Benítez— es clave para comprender el panorama poético actual del país.

En Poesía argentina del siglo XXI, el compilador reúne a una cincuentena de autores y autoras nacidos en Argentina y que publicaron su primer libro desde el 2000, con una intención federal que rompe con el habitual centralismo porteño. Benítez subraya que no busca establecer un canon ni una totalidad (imposible en tiempos de atomización), sino ofrecer un recorte dinámico que permita reconocer estilos, búsquedas y voces emergentes.

Este volumen funciona como una puerta de acceso a la poesía contemporánea y, especialmente, a las nuevas escrituras de mujeres que están renovando el mapa literario desde distintos territorios del país. Un complemento para completar esta selección y ampliar la mirada hacia lo que está pasando —y hacia lo que vendrá— en la poesía argentina.