Nahir Galarza, condenada a cadena perpetua, tiene una película

 

A lo largo de estos cuatro años, la relación tóxica y los supuestos abusos de su exnovio, la acusación a su padre de ser el verdadero autor del crimen y de ejercer violencia de género contra ella y su madre intentaron dar un giro en la causa sin embargo, rápidamente fueron descartados por la Justicia.

Todo esto será parte de Nahir, la nueva producción de Prime Video que llevará esta historia al cine de la mano de Valentina Zenere y que intentará echar luz sobre algunas posibles hipótesis de lo que pudo haber sucedido esa madrugada de diciembre de 2017 en la localidad de Gualeguaychú.

“Soy Nahir Galarza. No quieren saber qué pasó esa noche ¿o sí?”, dice a modo de anticipo el tráiler de esta película creada por Lucas Jinkis, dirigida por Hernán Guerschuny y escrita por Sofía Wilhelmi. La película llega el próximo 22 de mayo a Amazon Prime Video.

Lo cierto es que qué pasó durante esa madrugada del 29 de diciembre de 2017 sólo Nahir y el fallecido Fernando Pastorizzo lo saben. Una noche que, sin dudas, quedará grabada en la mente de miles de argentinos y que seguirá generando todo tipo de debates, teorías y especulaciones al respecto.

El adolescente de 20 años fue encontrado en una calle de Gualeguaychú con un tiro en la espalda y otro en el pecho. Junto a él, su moto y dos cascos en el suelo. ¿La principal sospechosa del crimen? Su novia Nahir Galarza, de 19 años.

"Ese día yo no podía reaccionar, no entendía lo que estaba pasando. No me acuerdo ni cómo hice para llegar a mi casa", reveló la joven tiempo después en una íntima entrevista con Mariana Fabbiani.

Si bien inicialmente declaró como testigo, a la noche siguiente la joven se presentó ante las autoridades y se culpó como la autora de los disparos efectuados con una pistola 9 milímetros, el arma reglamentaria que usaba su padre, Marcelo Galarza, integrante del cuerpo de Policía de Entre Ríos. Inmediatamente, quedó detenida: fue rechazado el pedido de prisión domiciliaria que había solicitado su defensa.

En su declaración indagatoria, Nahir confesó que los dos disparos que terminaron con la vida de su novio se habían producido "por accidente". Respecto a las razones por las cuales lo abandonó en la vía pública, explicó que quería devolver el arma que el propio Pastorizzo había tomado de su casa sin permiso para evitar que su padre sea inculpado.

"Mi hermano y yo sabíamos desde chicos que las cosas del trabajo de mi papá no se tocaban. Ellos no sabían que Fernando iba a casa esa noche. El agarró el arma y me fui con él amenazada", contó en la misma exclusiva que le dio a El diario de Mariana en 2019.

Sin embargo, los peritos arrojaron que no había indicios de que los disparos hayan sido involuntarios y el 3 de julio de 2018, casi en tiempo récord, la joven fue condenada a prisión perpetua por homicidio agravado por el vínculo, una sentencia que un año después fue confirmada por la Sala II de la Cámara de Concordia.

"La única vencedora es la Justicia. Hoy triunfó la Justicia, triunfó la verdad. Fernando no va a estar más entre nosotros, pero esto sienta un precedente. El fallo es una caricia al alma. No me siento aliviado, sí tranquilo. La gente sabe que fue un asesinato a mansalva, de una manera cruenta. Siempre fuimos con la verdad y de frente", sostuvo Gustavo Pastorizzo, padre de la víctima, a la salida del Tribunal.

Inmediatamente la defensa apeló el fallo bajo el argumento de que se había analizado el caso “con ausencia de perspectiva de género”. Sin embargo, esto fue rechazado. "Pretendo cambiar la perspectiva de género en la Corte para que tenga un valor nacional”, señaló la defensora legal de Galarza, Hermida Leyenda, llevando el caso ante la Corte Suprema de la Nación.

"Fue muy injusto lo que hicieron conmigo. Creo que me condenó la sociedad y la Justicia se prendió al juego mediático. La gente me juzgó sin saber lo que había pasado. A nadie le importó lo que me pasó a mí para llegar a una situación así", reveló Nahir dando cuenta de la relación tóxica y el abuso psicológico que vivió durante años al lado de Fernando. 

 

En medio de las apelaciones e intentos de cambio de carátula, salió a la luz una denuncia que la familia de la joven había realizado en 2014 contra el fallecido por un ataque "en manada". En ella, se asentaba un informe detallado de una médica que había examinado a la víctima y que daba cuenta de "escoriaciones en ambas muñecas, en antebrazos, en epigastrio (abdomen) y en muslo y pierna derecha".

“Estaba sentada con las manos atadas con una cinta negra de plástico, tenía sangre en las muñecas y en las piernas. Escuchaba que hablaban, pero no sé qué decían. Yo no estaba consciente, escuchaba las voces. Eran voces de hombres. Yo escuché dos”, le dijo Galarza a la psicopedagoga del departamento policial de Entre Ríos sobre el momento en que se despertó en un descampado.

A pesar de la contundencia de su relato, ese expediente se cajoneó y nunca fue tomado en cuenta en el juicio de 2018. "Hubiera influido mucho que mis amigas declararan. A veces usaba sus celulares para comunicarme con mis padres porque el mío no paraba de sonar y tenía que apagarlo. Ellas veían lo que venía pasando", indicó.

Y si bien nunca contó realmente lo que sucedió esa noche, la adolescente habló de la culpa que muchas veces siente por no haber contado lo que pasaba puertas adentro en su relación.

"Por más tóxica que haya sido la relación, le pediría perdón a él porque nadie es quién para decidir sobre la vida de otra persona (...) Fernando pudo haber evitado todo. Yo fui responsable de no haber cortado la relación antes o hacer una denuncia y contar lo que me estaba pasando, pero estaba cegada y no tenia noción de la gravedad de las cosas", expresó allá por 2019 haciendo un mea culpa.

A comienzos de 2022, la causa volvió a estar en el foco mediático cuando Nahir Galarza hizo una grave acusación: "Yo no maté a Fernando, fue papá", dijo la joven a través de un audio que su abogada se encargó de difundir por todos los medios.

Según sus dichos, su padre Marcelo Galarza habría cometido el homicidio delante de ella luego de descubrir que la víctima había tomado, por quinta vez y sin permiso, su pistola reglamentaria de policía. "Era la quinta vez que Fernando sacaba el arma de su padre de arriba de la heladera para obligar a Nahir a terminar la noche con él", contó Hermida Leyenda. Así reconstruyó, según su parecer, lo ocurrido esa noche fatídica.

"Esa última noche es evidente que Fernando lo vio llegar a Galarza con su auto. Frenó de golpe la moto y eso hizo que se cayera. El padre al bajar del auto, agarra el arma y dispara una vez. Fernando dice: 'Nahir, llamá a la ambulancia'. Pero Nahir no tiene tiempo a nada porque el padre vuelve a disparar. Le devuelve el arma a Nahir, como si alguna vez ella la hubiera tenido, y la hace ir a su casa con el arma", relató, mientras advertía que su defendida "no tenía idea de lo que estaba haciendo".

Ante esta versión de los hechos, el padre de Fernando no tardó en reaccionar calificando el relato de “juego mediático". "Nahir se está muriendo cada día, en cambio Nando está cada día más vivo en la memoria de todos nosotros", dijo en una entrevista con TN.

En esta nueva denuncia presentada en la Justicia, Nahir no sólo acusaba a su padre de ser el responsable de los hechos sino también de ejercer violencia de género contra ella y su madre, de quien se separó en 2021. Además, lo culpaba de ser cómplice del abuso sexual infantil que había sufrido por parte de su tío paterno, quien también era policía.

A pesar del peso de su declaración, la fiscalía de Gualeguaychú desestimó la denuncia argumentando que ese homicidio ya había sido analizado y tratado en juicio oral y público, y “confirmado en diversas instancias superiores".

Mientras que la madre de Nahir, Yamila Kroh, le puso una perimetral a su ex y deambulaba con un botón antipánico, la joven detenida inició una causa civil para cambiar su apellido paterno por el de su madre.  

Nahir ya cumplió cinco de los 35 años de sentencia que le dio la Justicia. Presa en el penal número 6 de Paraná, la joven de 24 años toma clases de música, estudia psicología, escribe poemas, dibuja y lee libros de mitología griega para pasar el tiempo. Además, trabaja en la lavandería del penal.

"La vida no se termina en una cárcel. Uno hace su vida normal, la única diferencia es la libertad que pesa mucho no tenerla. Si me pongo a pensar en la cantidad de años que me dieron en la condena caigo en un pozo depresivo por eso sigo viviendo mi vida", advirtió, mientras reconocía que lo más duro son los fines de semana cuando solía salir a bailar con sus amigas.

"Estar sola me ayudó a pensar mucho, a replantearme muchas cosas, a sanar y cambiar como persona", agregó quien se dio una nueva oportunidad en el amor después de lo sucedido. 

En julio de 2021, la entrerriana blanqueó su noviazgo con Matías Caudana, un joven al que conoció en la cárcel cuando éste solía visitar a su abuela detenida por narcotráfico. Sin embargo, la relación no prosperó y terminó al cabo de unos meses.

En 2022, Galarza volvió a sorprender por su romance con Javier Tapia Polo, un italiano que en las redes se define como fotógrafo y amante de los animales. Lejos de ocultar su amor, ellos intercambian románticos mensajes en las redes sociales sin miedo al qué dirán.

El “Ti voglio bene amore mio (Te amo mi amor)”, le escribió Nahir al ver una publicación que el joven había hecho para la Navidad pasada.

Cinco días después, volvió a gritar su amor a los cuatro vientos cuando posteó una imagen tomados de la mano junto a la leyenda: “El verdadero amor se manifiesta en pequeños gestos, en miradas atentas, en caricias inesperadas. En la presencia silenciosa que habla más que mil palabras”.