¿Cómo saber si mi entorno laboral es sano?
Aprender a gestionar el estrés laboral y detectar cuándo el ambiente laboral se convierte en algo nocivo para tu salud mental es fundamental para poder revertirlo. Conversamos con una experta.
15 de mayo de 2024
Según OMS, Los entornos laborales deficientes que, por ejemplo, dan cabida a la discriminación y la desigualdad, las cargas de trabajo excesivas, el control insuficiente del trabajo y la inseguridad laboral, representan un riesgo para la salud mental. - Créditos: Getty Images
¿Cómo te estás sintiendo en el ámbito laboral?, ¿registrás altos niveles de ansiedad y estrés? Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) todos los trabajadores/as tienen derecho a un entorno laboral seguro y sano, ya que se considera que el trabajo decente apoya la buena salud mental y proporciona un medio de vida; un sentido de confianza, propósito y logro; una oportunidad para las relaciones positivas y la inclusión en una comunidad; y una base para establecer rutinas estructuradas, entre muchos otros beneficios.
En España, por ejemplo, el estrés es el segundo problema más habitual en el entorno laboral, según informa el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST). Las consecuencias más visibles son baja de rendimiento, incremento del ausentismo, disminución de la productividad, entre otras.
¿Qué pasa en nuestro país, con la estabilidad económica generalmente al borde del precipicio y la salud mental, en consecuencia, en riesgo de derrumbe? Para obtener respuestas, conversamos con la psicóloga especialista en ámbitos empresariales Cecilia Lindner.
El autocuidado y el balance entre vida laboral y personal son fundamentales para cuidar la salud mental. - Créditos: Getty Images
La importancia de la buena gestión del estrés
En 2023, el síndrome de burnout (estar “mentalmente quemado”, sería su traducción) en Argentina tuvo una prevalencia del 94 por ciento respecto el resto de la región. Y viene aumentando año a año.
El estrés crónico es el vector fundamental para que suceda el burnout, el cual se suele manifiestar en tres grandes direcciones: agotamiento emocional, despersonalización y falta de realización personal.
La importancia de gestionar el estrés laboral es una prioridad que no deberíamos pasar por alto ya que puede ser disparador de diversas enfermedades entre ellas cuadros depresivos. “Pensemos que en los últimos años –continúa Ceci- se instaló el término burnout que se empezó a visibilizar y tener que ser tenido en cuenta en las empresas y organizaciones por tratarse de una problemática general que afectaba en escalas considerables los intereses laborales”.
Asimismo, analiza que con la pandemia por Covid 19 se aceleró la falta de limite claro entre vida laboral y personal. “Todos empezamos a recibir mensajes fuera de horario laboral. En los últimos años las empresas empezaron a revelar la importancia de sostener una vida balanceada.
Cuándo el espacio laboral es saludable
Ceci enumera algunos pilares que luego desarrolla en profundidad: aprender a gestionar el estrés, el autocuidado, lograr un balance adecuado entre vida personal y vida laboral, y, en lo posible, trabajar en sitios donde se cuide a los trabajadores: que la competencia y la exigencia desmedida tengan un limite oportuno.
“Un entorno laboral donde no se fomenta el autocuidado, donde hay un clima de competencia constante y no se respeta el tiempo personal, o donde se exige constantemente sin brindar momentos de pausa para reparar o para descansar, es un sitio muy desfavorable para la salud integral de sus trabajadores”, introduce mostrando la contracara de los lugares donde nos estresamos o podemos enfermarnos con facilidad.
En este sentido, nuestra experta asegura que es prioridad que “las empresas inviertan en la salud mental y física de sus empleados, es decir, que esté en la agenda cuidar a sus colaboradores. De otro modo, además de descuidar los derechos de sus empleados, descuidan la productividad de la empresa u organización”.
También considera que en contextos donde no hay un interés genuino en facilitar a los empleados/as vínculos saludables y espacios de recreación, lideres empáticos que estén atentos a la emocionalidad del equipo y a lo que cada persona pueda necesitar y, sobre todo, que exista seguridad psicológica que permita que cada persona pueda expresarme libremente sin sentirse juzgada por mostrarse de manera genuina, el índice de ausentismo se eleva y el rendimiento laboral baja considerablemente.
El síndrome de burnout viene en aumento en la región. - Créditos: Getty Images
Contra la idea de sacrificio, el autocuidado
La idea de que el esfuerzo y el sacrificio habla “bien de vos” en tu trabajo es algo cultural que deberíamos cuestionar. “Aun cuando te sentís mal, si tenés ‘la camiseta del trabajo puesta’ vas igual y eso se valora. En realidad, lo que estamos valorando es la cultura del ‘workaholic’ (adictos al trabajo) como si, al final, estuviéramos favor del estrés”.
“En general no hay consciencia de autocuidado, porque si de verdad quiero dar lo mejor de mi tengo que estar en buen estado físico y mental. A veces el mensaje es confuso acerca de qué es ser responsable o comprometido con el trabajo”.
La autoexigencia y el perfeccionismo también juegan malas pasadas: La sensación de que nunca llegamos a lo perfecto y por eso hay que constantemente dar algo más acelera el burnout.
“Para equilibrar tanto estrés es fundamental desarrollar el autocuidado, la amabilidad con nosotras/os mismas/os, practicas contemplativas como propone mindfullness o la meditación, todos elementos que contribuyen para dejar de pensar en términos de auto exigencia, y en cambio observarlo como autocorrecciones constructivas”.“El deporte, el movimiento, la alimentación, poder descansar bien y pedir ayuda profesional cuando vemos que nos supera y que necesitamos ayuda para obtener herramientas más allá de la información disponible en internet o en libros”, concluye
“El deporte, el movimiento, la alimentación, poder descansar bien y pedir ayuda profesional cuando vemos que nos supera y que necesitamos ayuda para obtener herramientas más allá de la información disponible en internet o en libros”, concluye.