
Qué es la tríada explosiva narcisismo, maquiavelismo y psicopatía
En psicología se identifican ciertos rasgos de personalidad que definen lo que comúnmente llamaríamos "mala persona". La falta total de empatía, la manipulación y la falta de remordimiento son algunas de ellas.
8 de enero de 2024

Tríada explosiva: narcisismo, maquavelismo y psicopatía. - Créditos: Getty
Cuando una persona te genera desconfianza porque nunca conecta con tu dolor o tu miedo y además no existe ningún tipo de remordimiento por no poder hacerlo, tampoco demuestra tener empatía y su necesidad siempre está por delante de la tuya, no lo dejes pasar livianamente porque puede que estés ante la presencia de la llamada “tríada oscura”.
La triada oscura es el principal modelo que estudia la personalidad socialmente aversiva y la divide en tres dimensiones: maquiavelismo, narcisismo y psicopatía.
El término “oscuro” apunta a que las personas con estos rasgos tienen una serie de características que dificultan las interacciones tanto en el ámbito personal y afectivo como en el profesional y laboral. Muchas veces son identificadas como “malas personas” por considerárselas insensibles, egoístas y malévolas. En el extremo más radical, podría tratarse de una persona con características de asesina.
De acuerdo a la mirada experta de Delroy Paulhus y Kevin-Williams, psicólogos de la Universidad de la Columbia Británica que acuñaron el término, la tríada oscura fueron los responsables de bautizar como triada oscura la parte más negativa de las relaciones humanas.
Como dice Gema Sánchez Cuevas, psicóloga y autora de “Ahora es tu momento. Claves para sanar y ser feliz” (2022), existen rasgos puntuales y reconocibles en cada una de las 3 características que detallamos a continuación.
1 - Narcisismo
Como ya te comentamos en otra oportunidad, las personas narcisistas encajan perfecto con el mito griego de Narciso.
Narciso responde a una figura de la mitología griega que se consideraba tan pero tan hermoso que se enamoró de su propia imagen reflejada en un estanque de agua. Por su ensimismamiento con su propia imagen, un día, después de tanto mirarse, se cayó al agua y se ahogó.
“Refiere a personas egoístas, con sentido egocéntrico y con una autoimagen positiva, aunque poco realista si tenemos en cuenta la visión de aquellos que les rodean. Son 'encantadores de serpientes': Al principio son muy queridos por los demás -sus comportamientos son agradables y atractivos-, pero con el paso del tiempo pueden llegar a ser muy peligrosos. Incluso, pueden dejar ver, sin querer, cuáles son sus verdaderas intenciones: conseguir más admiración y poder”, dice Gema.
El interés por los demás en personalidades narcisistas en igual a cero, no experimentan remordimientos y se muestran impasibles ante las necesidades y sentimientos de las personas que les rodean.
En cuanto a su principal debilidad se encuentra una baja autoestima, lo que va aparejado a una vulnerabilidad interna y cierta inestabilidad. De ahí que con frecuencia intenten relacionarse con personas que consideran inferiores para ejercer su dominio y sentirse poderosas.
2 - Maquiavelismo
“El fin justifica los medios” es la frase que identifica –y que legitima- el accionar cotidiano de las personas consideradas “maquiavélicas”.
Según explica el psicólogo americano Daniel Goldman, en su libro Inteligencia social, las personas con rasgos maquiavélicos son peligrosas ya que no experimentan arrepentimiento ni culpa. ¿Por qué? El punto crucial es que presentan una carencia en el procesamiento emocional tanto de lo que sienten ellos mismos como los demás. El consejo es poner límites claros y alejarse en el caso de que sea necesario.
Entre los rasgos principales, necesitan tener el control sobre absolutamente todo: cada paso que dan responde a un plan previamente analizado donde no aceptan ningún margen de error.
Por otro lado, suelen utilizar a las personas como objetos, y cuando estos dejan de serles útil, las desechan. Por la falta de empatía que los caracteriza, entienden a las otras personas como meros recursos para obtener algún tipo de beneficio.
A su vez, saben detectar las debilidades con mucha rapidez y, como es de esperar, utilizarla a su favor. Por eso siempre intentarán rodearse de personas fácilmente manipulables (con baja autoestima e inseguridades múltiples) y evitar las personalidades más fuertes.
3 - Psicopatía
Parecen no tener miedo ni ansiedad, suelen mostrarse valientes, decididos y que “firmes con lo que quieren”. La frialdad del psicópata es tan extrema como la nula empatía que logran establecer de manera genuina con el resto de las personas.
Por ejemplo, cuando ven a alguien llorando pueden acercarse y mostrar cierta compasión, pero no porque sienta una emocional real, sino solo por cortesía. Como dice Gema, al no conectar con el miedo, “son capaces de mantenerse serenos aun en situaciones emocionalmente intensas, peligrosas y aterradoras”.
Saben persuadir a los demás, aunque comprenden las relaciones y el comportamiento de los demás solo desde una perspectiva lógica o intelectual.
Según The Sociopathic Style, el psicópata es capaz de reconocer de qué cuerda debe tirar o qué botón es el que debe pulsar para engañar a otras personas, manipularlas y hacerles creer lo que sea necesario para obtener un beneficio personal sin preocuparse del impacto que esto pueda tener en los demás o en sus sentimientos.
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