Cinco formas de hacer la cena navideña más saludable, sin perder el sabor

Hacer una cena navideña más saludable no implica renunciar al sabor ni a los clásicos. Es que, con pequeños cambios en la composición del plato, buenos condimentos, ingredientes de estación y un poco de planificación, podés lograr un menú nutritivo, equilibrado y lleno de identidad que celebre la festividad con estilo y bienestar.

1. Poner a las verduras en el centro del plato

Una forma sencilla de hacer la cena más saludable es invertir la proporción entre proteína y vegetales. En lugar de empezar con una gran porción de carne y acompañarla con ensalada, hacé que los vegetales sean protagonistas: un salteado de verduras de estación como zanahorias, zucchini, brócoli y repollitos asados puede aportar color, textura y nutrientes sin sentirse como una guarnición aburrida.

2. Condimentar con inteligencia para potenciar sabor

Muchos asociamos saludable con comida simple o sosa, pero eso está lejos de ser cierto. Condimentar bien es clave para lograr platos sabrosos sin necesidad de excesos de sal o grasa, y el uso de hierbas frescas, especias variadas y cítricos puede enriquecer incluso las preparaciones más sencillas, evitando recurrir a salsas pesadas.

3. Pensar el plato desde los ingredientes, no desde la etiqueta

Otro consejo valioso es pensar las comidas desde los ingredientes y no desde el nombre del plato. Esto significa diseñar el menú navideño considerando cómo combinar vegetales, legumbres, cereales integrales y proteínas magras en vez de repetir siempre las mismas fórmulas tradicionales. Esta mirada no solo mejora el perfil nutricional general, sino que también abre la puerta a texturas y sabores nuevos que pueden sorprender a tus comensales. 

4. Reducir azúcares y lácteos con azúcar agregada

Los postres navideños son uno de los mayores desafíos para mantener una cena saludable. Una forma de equilibrar es optar por versiones más ligeras de recetas tradicionales o disminuir la cantidad de azúcares añadidos, sin eliminar por completo el placer del dulce. Del mismo modo, reducir lácteos con azúcar agregada en algunas preparaciones como cremas o tiramisús, ayuda a bajar calorías y mantener el sabor. 

5. Planificar y preproducir para evitar tentaciones last minute

La planificación de la cena hace una gran diferencia a la hora de mantener hábitos saludables. Preparar anticipadamente algunos componentes como salsas ligeras, vegetales asados o aderezos caseros no solo te ahorra tiempo, sino que también evita que termines recurriendo a opciones menos nutritivas a último momento. La idea es hacer un pequeño plan que puede transformar la experiencia culinaria sin estresarte ni terminar en un exceso de calorías.